Way Of Choices - Chapter 820

Capítulo 820 - La brisa de primavera entra en la ciudad vieja

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

La marea negra se detuvo en las distantes llanuras. Incluso con el Thousand Li Mirror especialmente construido del clan Tang, era muy difícil decir claramente a quién pertenecía esta caballería.

Después de un corto tiempo, un centenar de caballeros se separó del ejército y galoparon hacia la ciudad de Wenshui, sin tener en cuenta las ballestas divinas montadas en las paredes. A pesar de que habían sido perforados innumerables veces, los soldados y guardias en las paredes todavía se ponían nerviosos ante esta visión. Después de todo, todavía no tenían ninguna experiencia real.

El maestro de la ciudad fue escoltado apresuradamente a las murallas de la ciudad por sus subordinados. Ni siquiera había tenido tiempo de ordenar su ropa, y mucho menos ponerse una armadura.

Mientras miraba la lejana marea de la caballería y el escuadrón de cientos de caballería cada vez más cerca, el maestro de la ciudad se volvió más pálido y pálido.

Los ciento cuarenta caballeros ya habían entrado en el rango de las ballestas divinas, pero no se atrevió a dar la orden de disparar. Sudando profusamente, se volvió hacia los guardias del clan Tang y preguntó en pánico: "¿Dónde está el clan principal? ¿Por qué el clan cabeza no ha enviado a nadie?"

El maestro de la ciudad de Wenshui fue nombrado por la Corte Imperial, pero era muy consciente de que nunca podría ser el amo de esta ciudad.

Durante miles y miles de años, el maestro de esta ciudad siempre había sido un apellido: el clan Tang.

Había pasado bastante tiempo desde que las primeras campanas de advertencia habían sonado. No importa qué tan lenta sea su respuesta, el clan Tang ya debería haber enviado a alguien.

¿Por qué las únicas personas en las paredes eran esos guardias, pero ni una sola figura importante del clan Tang?

Un consejero miró a la caballería que se acercaba y pensó en una posibilidad. Susurró, "Si no hay actividad del clan principal, significa que no debe haber ningún problema".

El maestro de la ciudad encontró estas palabras bastante razonables. Se secó el sudor frío de la cara y preguntó tembloroso: "Entonces ... ¿quién ha venido?"

......

......

Pasó el tiempo y cientos de caballería llegaron a las murallas de la ciudad de Wenshui.

No hubo batalla, porque la gente en las paredes se dio cuenta rápidamente de la identidad de estos visitantes.

Estos visitantes a la ciudad de Wenshui no eran un ejército expedicionario de la raza Demon, sino dos mil escoltas de caballería.

Su misión era escoltar a tres arzobispos del Salón Sagrado a la ciudad de Wenshui.

La razón por la que los tres arzobispos de la Sala Sagrada habían llegado a la ciudad de Wenshui era aún más simple: asistir al Papa.

Sin importar qué tan molestos estaban los soldados y ciudadanos de la ciudad de Wenshui por la abrupta visita de esta mañana, no tenían justificación para impedir que los arzobispos ingresaran a la ciudad.

La gran mayoría de los dos mil jinetes permanecieron en las llanuras, sin mostrar ninguna hostilidad.

La pesada puerta de la ciudad que acababa de cerrarse se abrió lentamente.

Dos grandes vagones escoltados por cien caballeros entraron en la ciudad, observados por innumerables personas con emociones encontradas.

El arzobispo An Lin habló unas palabras al maestro de la ciudad a través de la cortina, sin mostrar intención de abandonar el carruaje.

La gente en las calles miraba con interés a la figura en el carruaje, algunos incluso se postraban piadosamente y rezaban en el suelo.

Linghai Zhiwang y Daoist Baishi seguían sentados en el mismo carruaje.

"La reacción del clan Tang es muy rápida. Ah, no son tan fáciles de atacar".

Linghai Zhiwang dijo inexpresivamente mientras miraba a través de la cortina, examinando a los guardias del clan Tang que claramente no eran parte del ejército de la Corte Imperial.

Hubo muchos significados más profundos contenidos en este comentario, pero Daoishi Baishi solo dio una leve sonrisa, nada más.

Linghai Zhiwang lo miró y dijo: "La ciudad de Wenshui nunca se ha enfrentado al fuego de la guerra, entonces ¿por qué el clan Tang es tan cuidadoso y cuidadoso? Incluso no les importa exceder las normas e instalar tantas ballestas divinas y matrices, y por qué ¿Tantas tropas privadas? ¿Podría ser ... que están pensando en la rebelión?

El significado fue más explícito aquí. La sonrisa de Daoishi Baishi se desvaneció, pero él todavía no dijo nada, ya que no sabía cómo responder.

......

......

Dos mil caballeros escoltaron a tres Prefectos de la Ortodoxia a la ciudad de Wenshui.

Tenían amplias razones, ya que tenían que garantizar la seguridad del Papa.

Nadie pudo expresar ninguna objeción.

Pero nadie olvidaría un hecho crucial: el Palacio Li no había informadod Ciudad de Wenshui de antemano.

Tomar sin preguntar era robar, venir sin preguntar era un ataque sorpresa.

Dos mil caballeros habían aparecido repentinamente afuera de la ciudad de Wenshui, sus cascos retumbando destrozando la luz de la mañana.

Aunque no pasó nada, toda la ciudad de Wenshui se sintió nerviosa e inquieta esa mañana.

Hace mil años, el ejército demoníaco descendió desde el norte y colocó a Luoyang bajo un asedio prolongado, con su vanguardia a solo trescientos li de la capital. Y sin embargo, nunca habían logrado llegar a la ciudad de Wenshui.

Aún más en el pasado, en esa era caótica en la que los señores de la guerra lucharon por el poder, el continente se iluminó con faros de fuego, la gente se desplazó y vastas extensiones de tierra se convirtieron en tierra arrasada. Solo la ciudad de Wenshui no sufrió ningún ataque, pero observó en silencio cómo el mundo se sacudía en la agitación.

Esta fue la primera vez en incontables años que la ciudad de Wenshui vio un ejército.

¿Por qué la ortodoxia actuó de esta manera? Para mostrar su poder al clan Tang? ¿Estaban preocupados por la seguridad del Papa? ¿O querían asustar a algunas personas en la ciudad de Wenshui?

Como enviado imperial, el Príncipe de Zhongshan no había regresado inmediatamente a la capital después de abandonar la sede del Ejército de Mount Song. En cambio, él había representado al emperador e inspeccionado a los otros ejércitos en el norte. Cuando recibió esta noticia, estaba en Blue Pass, y la primera pregunta que pensó no fue ninguna de las anteriores, sino que la gente de la ortodoxia no fue a la provincia de Cong.

Un día, Linghai Zhiwang y otros dos Prefectos de la Ortodoxia habían traído a dos mil jinetes y atacaron el Monte Song con su ímpetu estruendoso. Usando el intento de asesinato contra el Papa, habían arrebatado la posición del divino General del Monte Song Army. Un gran porcentaje de su éxito podría atribuirse al hecho de que habían llegado demasiado rápido.

Los dos mil caballeros ortodoxos habían sido guarnecidos en las afueras de la ciudad de Xunyang y no había nada más que páramos entre allí y el cuartel general del Ejército Mount Song, por lo que no era demasiado inconcebible que sus movimientos estuvieran ocultos de la Corte Imperial. La pregunta era, sin embargo, cuándo habían dejado esos tres prefectos ortodoxos en el Li Palace. ¿Cómo se había dado cuenta nadie en la capital?

La Corte Imperial naturalmente no permitiría que algo así vuelva a ocurrir. Una vez que los tres Prefectos Ortodoxos tomaron sus dos mil jinetes y abandonaron el cuartel general del Ejército Mount Song, fueron constantemente vigilados por el Gran Ejército Zhou. Todos sabían que se estaban acercando a la sede del ejército de la provincia de Cong.

Esto era algo que mucha gente en la corte había predicho.

La ortodoxia no podría haber enviado una fuerza tan grande solo para la sede del ejército Mount Song.

La sede del ejército de la provincia de Cong se encontraba en el remoto oeste, la vida allí era difícil, y también era extremadamente importante. Críticamente, aquí fue donde Xue Xingchuan había comenzado su ascenso. A pesar de que había estado muerto durante tres años y la Corte Imperial había ejecutado muchas purgas, todavía era imposible borrar por completo su influencia.

Desde todos los ángulos, la sede central del ejército de la provincia de Cong debería haber sido un objetivo de la ortodoxia.

¿Quién podría haber esperado que los tres Prefectos ortodoxos y sus dos mil caballeros cruzarían la montaña sin vida y desertarían de la noche a la mañana y aparecerían de repente fuera de la ciudad de Wenshui?

¿Qué quería hacer la ortodoxia? ¿Ese joven Papa realmente se volvió loco e intentó masacrar a Wenshui?

El Príncipe de Zhongshan finalmente comenzó a reflexionar sobre estas preguntas, su expresión se volvió más fría y fría.

Simplemente no creería una conjetura tan absurda, ya que estaba muy seguro de que el joven Papa no podría lograr semejante hazaña.

¿Y masacrar a Wenshui con solo dos mil caballeros? Esto subestimó demasiado la sabiduría del Papa y la fuerza insondable del clan Tang.

En este momento, un estallido de vítores repentinamente surgió de las calles del cuartel general del ejército.

El Príncipe de Zhongshan frunció el ceño y preguntó: "¿Qué pasó?"

Aunque habían pasado unos momentos, los vítores de afuera no tenían intención de detenerse, y en realidad se estaban haciendo más fuertes, como si todo Blue Pass estuviera celebrando algo.

el divino general Jian Xi entró en la sala militar y dijo con voz algo sombría: "Acabamos de recibir noticias de que el nuevo lote de Cinnabar Pills comenzará a distribuirse mañana".

La mirada del Príncipe de Zhongshan se volvió más y más serena cuando pensó, no sé cuán inteligente es Su Santidad, pero su porte es verdaderamente inusual.

......

......

Wenshui erauna de las pocas ciudades en el mundo que podría llamarse antigua, y en las profundidades del invierno, cuando la nieve y las hojas amarillas contrastaban entre sí, parecía aún más serena.

Cualquiera que haya visto sus antiguos muros moteados o aquellos signos que no han cambiado a pesar de los cientos de años de viento y lluvia, podría sentir el aura espesa de la historia.

Al recordar ese noble clan dentro de la ciudad, este aura espesa de la historia se completaría con un poder que había perdurado a través de las tribulaciones del tiempo.

Incluso Linghai Zhiwang dejó de estar tan irritable al entrar a la ciudad, volviéndose algo taciturno.

Levantó la cortina, primero viendo a esas personas, arrodillados o de pie, en el camino, y luego viendo la luz en el agua.

La ciudad de Wenshui estaba más al norte que la capital, pero el río que era su homónimo no se congeló incluso en las profundidades del invierno, pareciendo que podía fluir para siempre.

Solo la hierba moteada de nieve junto al río y dos o tres flores amarillas que claramente habían sido congeladas hasta la muerte eran prueba de leyes casi imparables de la naturaleza.

El carruaje se detuvo frente a la iglesia taoísta. Linghai Zhiwang subió los escalones de piedra, con Daoishi Baishi y el Arzobispo An Lin siguiéndolo.

Al final de este tranquilo y aislado camino de piedra estaba la puerta sagrada que conducía a la sala posterior.

Un árbol de pera fue plantado detrás de la puerta, y debajo del árbol estaba un hombre joven.

A Linghai Zhiwang no le gustaba este joven.

Nunca le había gustado.

Incluso después de descubrir que el joven era un sucesor legítimo de la ortodoxia, todavía le resultaba imposible entender por qué el Papa que había venerado por encima de todo había elegido a esta persona como su sucesor.

En su opinión, aunque este joven ciertamente no era cobarde, aún carecía de ventaja. Él no tenía vida y no mostró preferencia por nada.

La falta de preferencia significaba que no le gustaba ni le desagradaba, y que sin gustos y aversiones feroces, uno no entendería lo que significaba "responsabilidad".

En este momento, cuando vio esa figura bajo el peral, finalmente entendió algo.

El joven nunca había estado sin vida.

Él había estado tranquilo y sereno.

Este joven era como un pequeño arroyo.

La corriente podría haber sido algo superficial, pero estaba muy clara. Uno podía ver los peces en el fondo y su propio reflejo.

La corriente parecía suave y suave, pero también increíblemente tenaz. Ni siquiera la espada más aguda podría cortar su flujo.

La corriente parecía muy tranquila, pero en realidad, contenía un ímpetu creciente inimaginablemente poderoso. Podría atravesar montañas, abrir nuevas tierras y fluir hacia el oeste hasta el océano.

Era como si todos supieran que no debería haber venido a la ciudad de Wenshui, que no era una ventaja para él venir a la ciudad de Wenshui, pero que todavía había venido.

Linghai Zhiwang finalmente entendió la elección del Papa.

Él se postró con calma.

El taoísta Baishi y An Lin se miraron con sorpresa en sus caras, y luego se postraron también.

El joven se dio la vuelta y dijo: "Levántate".

Una brisa fresca sopló, causando innumerables flores diminutas que caen del árbol y llueven sobre su cuerpo. Cuando cayeron sobre sus hombros, parecían puros y limpios, como copos de nieve.

Pequeñas flores blancas llovían, cubriendo el suelo.

En ese momento era el frío invierno, entonces ¿por qué había una vista tan hermosa?

Tal vez fue porque ayer había hecho las pastillas, causando que el jardín se calentara repentinamente y la vida floreciera gradualmente.

Por lo tanto, era como una brisa de primavera que había llegado en la noche y había hecho florecer todas las flores del peral.

(Fin del Libro 5 - Las flores amarillas del campo de batalla)