Ze Tian Ji - Chapter 682

Capítulo 682 - Los vivos

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Madame Xue no estaba asustada, ni estaba enojada. Al mirar al supervisor del Ministerio de Justicia, dijo en voz baja: "No existe tal artículo en las leyes del Gran Zhou".

El supervisor, viendo que ella no estaba dispuesta a retirarse y que todavía estaba tan tranquila, no pudo evitar sentirse más furiosa. Haciendo un gesto para que sus subordinados vinieran y se la llevaran, maldijo: '' Vieja bruja traidora, si no te largas y sigues obstruyendo a este oficial para realizar negocios oficiales, no culpes a este oficial por ser grosero, y cuando llegue el momento, ¡no te asustes repentinamente del dolor! ''

Esta fue una amenaza desnuda.

No importaba cuán persistente e inquebrantable fuera la personalidad de Madam Xue, le era imposible superar las picas en manos de esos soldados. Se estaba preparando para partir con una expresión sombría cuando de repente sintió que la voz que acababa de escuchar era bastante familiar.

Volvió a mirar al supervisor del Ministerio de Justicia y se dio cuenta de que parecía algo familiar. Inseguro, ella le preguntó: "¿Te ... te conocí en algún lado antes?"

La tez del supervisor se volvió fea al instante y gritó con dureza: "¡Aleja a esta persona de aquí!"

Los soldados del Departamento de la Puerta de la Ciudad se adelantaron, preparándose para ahuyentar a Madame Xue.

Madam Xue recordó de repente y miró a la persona con una pequeña sorpresa. "¿Eres Tianhai Sheng?"

La cara del supervisor palideció levemente y su voz se volvió más estridente. Le gritó a la multitud, "¡qué estás esperando para nada!"

En estas palabras, los soldados del Departamento de la Puerta de la Ciudad ya no se atrevieron a detenerse. Levantaron sus armas como si estuvieran a punto de atacar, para asustarla.

Sin embargo, Madame Xue parecía no ver estas espadas y espadas brillando con luz fría. Solo se quedó mirando al supervisor del Ministerio de Justicia que estaba fuera de la multitud, con una expresión de burla teñida de pena.

Realmente había conocido a esta persona antes, en su propio patrimonio.

Esta persona era un pariente cercano del clan Tianhai. Utilizando su relación con el clan Tianhai, había molestado a muchas personas por sus contactos sociales. Él había sido extremadamente respetuoso con ella y Xue Xingchuan, enviándoles obsequios extremadamente valiosos en busca de una comisión.

Xue Xingchuan nunca había aceptado regalos, y tampoco ella, pero finalmente había ayudado a esta persona. Al final, no había sido un gran problema para ellos.

Después de varios años, parecía que esta persona se había portado bastante bien en el ministerio. Había sido designado como supervisor y no había estado implicado en nada. Ahora, la Corte Imperial aún le daba una responsabilidad tan pesada.

Cuando pensó en la cara de esa persona y la comparó con la cara de esa persona, Madam Xue solo sintió una completa ironía en todo eso.

En esta purga de la capital que había tenido lugar en los últimos días, el grupo con la postura más feroz y el más vicioso de los métodos no eran los antiguos ministros que se habían opuesto a Tianhai durante tantos años, ni eran los príncipes de los Chen. clan. En cambio, fueron los ministros de la corte quienes fueron más leales y devotos de Tianhai, y aquellos funcionarios subordinados al clan Tianhai que alguna vez actuaron con la mayor despreocupación.

Esto parecía algo loco, inconcebible, pero en los incontables años de historia, este había sido siempre el caso.

Después de una gran empresa, aquellos que parecían más locos y que a menudo realizaban las acciones más inconcebibles eran precisamente los traidores. Era como si solo a través de estas acciones casi histéricas pudieran demostrar que su lealtad ahora era diferente de su lealtad, podrían convencerse a sí mismos de que no tenían que preocuparse de que los nuevos gobernantes los descartarían, obteniendo así una libertad desprovista. de miedo.

Este fue el caso del supervisor del Ministerio de Justicia, del Departamento de la Puerta de la Ciudad, de varios eunucos en el palacio, de los funcionarios subordinados del clan Tianhai y también de Zhou Tong.

Se dijo que en las primeras horas de la mañana después del golpe, Zhou Tong fue tratado con la técnica de Luz Sagrada. Tan pronto como comenzó a recuperarse de sus graves heridas, convocó a sus subordinados en el Departamento de Oficiales Purgadores y comenzó a atender los negocios, protegiendo al emperador al servicio del nuevo gobierno.

Mientras pensaba en estos rumores y miraba a este supervisor del Ministerio de Justicia, el aura burlona sobre la sonrisa de Madam Xuese hizo más y más grueso, cada vez más deslumbrante.

El supervisor sintió que sus propios ojos estaban a punto de cegarse y su malicia se disparó. Ya no deseaba alejarla, sino que gritaba: "¡Captúrala para mí!"

......

......

En el Li Palace

Mao Qiuyu estaba viendo al Papa regar la Hoja Verde. Informó: "La inspección del Seminario del Templo está completa. Todos los estudiantes ya han regresado. La Academia Li Palace ... dos estudiantes fueron enviados a la prisión de Zhou. En un momento, Siyuan personalmente irá a recuperarlos. El lado de Radiant Green es un poco más pacífico. Todas las puertas de la Academia Heavenly Dao han sido cerradas, y no se permite que los estudiantes se vayan. Solo la Academia Ortodoxa no ha prestado atención ''.

La Hoja Verde en la maceta claramente estaba perdiendo una hoja, sin embargo, parecía faltar mucho más, emitiendo una sensación hueca.

Sin volver la cabeza, el Papa dijo: "Como estos asuntos se han manejado adecuadamente, ve y ve al General Xue fuera".

Mao Qiuyu asintió y se volvió para salir del pasillo. Después de un momento, regresó y dijo: "Alguien ya se ha ido".

El cuerpo del Papa se detuvo momentáneamente. ''¿Quien fue?''

Mao Qiuyu respondió: "Esa persona".

El Papa estaba algo perplejo. "Ese niño tiene un corazón amable, pero su personalidad ciertamente no es tan directa".

Mao Qiuyu negó con la cabeza, explicando, "Aparentemente, pasó por allí".

......

......

Se había sentado en silencio en la biblioteca durante tres días, y luego tomó tres llamadas en Eunuch Lin, el Príncipe Chen Liu y el Papa.

Chen Changsheng solo sabía de lo que había sucedido esa noche, pero no tenía idea de lo que había estado sucediendo en la capital en los últimos días.

En este momento, él y Su Moyu estaban paseando por la capital.

La razón por la que se habían marchado era porque la situación en la capital se estaba asentando gradualmente. Se había sentado en la biblioteca por mucho tiempo, y tanto su cuerpo como su mente se sentían algo lentos. Además, sabía muy bien que solo porque era muy difícil para él abandonar la capital no significaba que no pudiera abandonar la Academia Ortodoxa. Lo más importante, quería saber dónde estaba Zhexiu.

Las hojas cayeron en el río Luo, ligeramente lavadas de un lado a otro. Era como esas hojas, vagando sin rumbo.

Tal vez porque estaba actuando de acuerdo con los pensamientos en lo más profundo de su corazón, este caminar sin rumbo le llevó a él y a Su Moyu a la puerta de la ciudad.

Esto también se debía a que la capital nunca había tenido una muralla, por lo que la puerta de la ciudad era demasiado discreta.

Los sauces a ambos lados de la carretera oficial se extendían como dos líneas verdes rectas en la distancia. Bajo el sombrío sol de otoño, presentaban una vista encantadora.

Si no fuera por los gemidos, el ruido, la sangre y ese hedor.

Chen Changsheng vio las manchas de sangre en la carretera y también las moscas negras en los campos a los lados de la carretera.

El hecho de que hubiera tan grandes grupos de moscas en el frío otoño era realmente irritante, al igual que los soldados del Departamento de la Puerta de la Ciudad que rezumaban con intención asesina y esos funcionarios.

Mucha gente de la capital estaba presente.

A través de las conversaciones cautelosas y las maldiciones susurradas de la multitud, Chen Changsheng y Su Moyu aprendieron rápidamente toda la historia de este asunto.

Él caminó hacia adelante y vio a esa mujer cansada, demacrada, débil, pero firme y persistente, calmada y valiente en el frente de la multitud.

En realidad era la esposa de Xue Xingchuan.

Luego, vio a esos valientes y decididos soldados, cubiertos de sangre y gravemente heridos, cuyos ojos no mostraban remordimiento, solo ira y renuencia.

En realidad, eran soldados de Xue Xingchuan.

......

......

Hace un momento, justo cuando los subordinados del supervisor del Ministerio de Justicia estaban a punto de atacar a Madame Xue, unos diez soldados salieron de la ciudad de repente.

Estos soldados eran del ejército de la provincia de Cong. Después de recibir elogios, habían regresado a la capital para descansar durante el otoño.

El ejército de la provincia de Cong era donde Xue Xingchuan se había hecho famoso. También fue donde luchó contra los demonios y logró el mayor mérito.

Xue Xingchuan había regresado a la capital tantos años atrás, por lo que naturalmente no recordaría a estos soldados ordinarios, pero estos soldados nunca habían olvidado a su general.

Habían estado secretamente esperando por un momento para robar los restos de Xue Xingchuan y enterrarlos. Sin embargo, cuando Madam Xue era yon peligro, encontraron imposible permanecer oculto.

El desorden concluyó rápidamente. Madame Xue había estado asustada, pero no herida. Esos soldados del ejército de la provincia de Cong habían sufrido bajas desastrosas y eran un espectáculo espantoso.

Un subdirector general del Departamento de la Puerta de la Ciudad miró a los soldados fuertemente heridos del ejército de la provincia de Cong y los reprendió severamente: "el divino general Xue ya ha sido capturado". Dentro de unos días, será enviado a la capital para su juicio. ¿Acaso los soldados con cabeza de confusión se atreven a desafiar el decreto y perjudicar a los demás? ¿Estás planeando una rebelión? ''

La voz de Madame Xue tembló, pero aún así fue cortés. '' General, solo queríamos enterrar un cuerpo, no planear una rebelión ''.

El diputado general la miró en silencio y luego dijo: "Señora, cualquiera que se atreva a enterrar el cuerpo de su marido está planeando la rebelión".

El supervisor del Ministerio de Justicia le dirigió una sonrisa burlona a Madame Xue con una profunda malicia.

Este era un asunto que era claro para todos, pero fue solo en este punto que alguien lo dijo tan claramente.

La emperatriz divina Tianhai había muerto, Xue Xingchuan también había muerto, y Xue estaría muerto en unos días. El general divino segundo clasificado cuya reputación una vez sacudió todo el continente ahora no era nada en absoluto.

Sus restos no podían ser enterrados y se habían convertido en una exhibición de la fortaleza de la Corte Imperial, así como en la aprobación implícita de quien lo había envenenado.

Su viuda estaba a punto de sufrir todo tipo de humillaciones. En última instancia, podría arrojarse al agua y ahogarse, ahorcarse de una viga del techo, o vivir sus días amargos hasta que murió de viejo.

Sus tropas abandonadas tampoco recibirían ningún tipo de honor. Todo lo que les quedaba era recuerdos y dolor inolvidables.

......

......

"Por la noche, iré y me ocuparé de este asunto".

Su Moyu se paró frente a Chen Changsheng y habló con un tono incuestionable.

El miserable encuentro de Xue Xingchuan fue una piedra de toque para el nuevo gobierno, un poste de madera erigido frente a la puerta de la ciudad. (TN: Una piedra de toque es un cierto tipo de piedra utilizada para diferenciar las aleaciones de oro en función de la marca que dejan. El poste de madera frente a la puerta de la ciudad es una referencia a una historia sobre Lord Shang Yang, un reformador de la estado de Qin durante la era de los Estados Combatientes. Shang Yang tenía la intención de llevar a cabo una serie de reformas en Qin, pero le preocupaba que la gente común no creyera que el gobierno fuera serio. Por lo tanto, Shang Yang colocó un poste de madera en el la puerta sur del mercado en la capital de Qin y anunció que cualquiera que moviera este poste desde la puerta sur hasta la puerta norte recibiría diez taels de oro. Nadie intentó mover el poste, por lo que elevó la recompensa a cincuenta taels de oro. Oro. Una persona finalmente movió el poste, y Shang Yang ordenó que se le pagaran cincuenta taels de oro, lo que ilustra que el gobierno tenía la intención de hacer lo que anunció.)

Su Moyu sabía que, dado que Chen Changsheng había visto esto, definitivamente le importaría, pero la identidad de Chen Changsheng era demasiado sensible. Si él actuara, muy fácilmente se convertiría en algo grande, por lo que decidió dejar su preocupación.

Desde cualquier ángulo, este era un plan muy valiente y bastante más confiable, pero Chen Changsheng no lo creía.

En realidad, ya habían pasado cuatro días, ¿cómo podría durar un día más?

Salió de la multitud y se dirigió hacia Madame Xue, y luego dijo: "Saludos".

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