The Portal Of Wonderland - Chapter 150

Capítulo 150 - El Monte del Caballo Blanco

Con el único brazo, Seda se adelantó tenazmente. Sus costillas estaban llenas de grietas impuestas por la guerra. Afortunadamente, su cabeza, brazo derecho y hombro lograron sobrevivir intactos.

La seda seguía arrastrándose arduamente en busca de piezas de hueso que pudieran usarse para unir su cuerpo, el trabajo no le llevó mucho tiempo. Poco después, su marco se completó de nuevo, y la espalda era su destreza de movimiento habitual.

Seda probó las nuevas extremidades y quedó bastante satisfecho con ellas. Después de ajustarse por completo al nuevo cuerpo, comenzó a vagar por los campos de batalla, y luego se detuvo por un esqueleto gris que había sido cortado en dos mitades. Las dos llamas verdes pálidas en las cuencas de los ojos del esqueleto no habían desaparecido, haciendo que Seda levantara rápidamente su pie y aplastara la cabeza del esqueleto.

Con un sonido nítido, el cráneo se rompió en pedazos, haciendo que flotase una luz verde que Silk inmediatamente respiró.

Los campos de batalla en el Espacio de la Muerte tenían muchos esqueletos cuyo fuego espiritual no se había extinguido por completo. La seda deambulaba y en poco tiempo había absorbido muchos de los fuegos espirituales. De este modo, su propio poder espiritual se fortaleció, provocando que las llamas en sus ojos se tornaran en un azul pálido y ganaran brillo. Desde la distancia, los dos ojos se parecían a dos pequeñas luces azules de la antorcha.

En el proceso, las grietas en sus huesos por todo su cuerpo se fueron fusionando gradualmente hasta que finalmente desaparecieron. Después de una hora, Seda se detuvo en el suelo, los fuegos azules en sus ojos estaban saltando.

Bruscamente dio media vuelta y se puso en cuclillas junto a un esqueleto de plata medio muerto, mirándolo atentamente. Los fuegos azules seguían parpadeando, indicando que su dueño estaba sumido en profundos pensamientos.

El esqueleto de plata devolvió la mirada de Seda temerosamente mientras el espíritu verde pálido se encendía en sus ojos se estremeció en silencio.

De repente, Seda se inclinó y le arrebató la cabeza del esqueleto mientras simultáneamente abría su boca. El cráneo lanzó una luz verde y Seda lo inhaló rápidamente. Inmediatamente, los fuegos espirituales de Silk sufrieron un cambio violento, cayendo como olas dentro de las cuencas de los ojos.

Después de un momento, Seda volvió a abrir la boca y escupió otro fuego verde que desapareció en la cabeza del esqueleto plateado. El cráneo respondió, y luego sus ojos se iluminaron de nuevo. Como si se tratara de una comunicación, los ojos de Seda brillaron varias veces en consecuencia antes de volver a colocar el cráneo en el cuerpo del esqueleto.

Hubo algunos crujidos y crujidos del esqueleto plateado. Lentamente, se puso en pie tambaleándose, resultando ser aún más alto y más fuerte que Silk. Reverentemente, se arrodilló a los pies de Seda. Seda levantó la cabeza, abrió la boca y lanzó un grito silencioso. Después de hacer esto, dio media vuelta y se dirigió al siguiente campo de batalla. El esqueleto de plata se levantó y siguió de cerca a Seda.

Después de menos de medio día, cuando Silk dejó el siguiente campo de batalla, le siguieron dos esqueletos piadosos, ambos mucho más fuertes que él.

......

Un mes despues.

En algún lugar en el noroeste del páramo, el paisaje adquirió una forma diferente: había flores y hierbas en la medida en que los ojos podían ver, reemplazando la desolación ordinaria del desierto. Incluso había un verde bosque verde que causaba una gran diferencia con el río azul que balbuceaba. La corriente fue rápida y clara. Al final del río se alzaba una montaña que llegaba a los tres mil metros.

La montaña, de pies a cabeza, era extrañamente blanca. Las piedras también tenían una forma extraña. Mirando a lo lejos, la montaña se parecía a un caballo blanco parado sobre sus patas traseras. De ahí su nombre el "Monte del Caballo Blanco" por los bárbaros.

El Caballo Blanco estaba parado allí como una montaña de significado peculiar, se decía que el área circundante era el origen de los antiguos gigantes, considerándolo como un lugar sagrado. En consecuencia, el Monte del Caballo Blanco se convirtió en una montaña sagrada.

En lo alto, se erguía un imponente palacio blanco, era la Meca de todos los bárbaros, así como también la residencia del Gran Chamán. Es conocido como el Sagrado Palacio de Nieve.

En este momento, en una colina no lejos de la montaña sagrada, un par de viajeros miraban al Caballo Blanco. El hombre llevaba un abrigo de piel de león en un Four Odd, mientras que la mujer tenía un manto de piel de zorro alrededor de su hombro. Ella estaba montada en un caballo bárbaro castaño. La pareja era exactamente Shi Mu y la princesa, que había soportado todo el trabajo pesadopara venir acá.

Durante el viaje, los dos habían cambiado su disfraz en numerosas ocasiones, también saliéndose de su camino para esquivar a algunas de las tribus más feroces. Finalmente, llegaron hasta el área periférica de la montaña sagrada en una sola pieza. Al llegar a la ubicación, ahora podían arrojar sus disfraces, pero aún conservaban las vestimentas bárbaras.

Shi Mu desvió sus ojos del Sagrado Palacio de Nieve, al pie de la colina donde ahora estaban parados. Había un campamento militar bárbaro protegiendo día y noche. Las tiendas eran todas blancas e incluso todos los edificios estaban hechos de rocas blancas. Este campamento no se puede contar como uno grande. En el mejor de los casos, consistía en trescientos soldados que estaban atentos a la única senda que llevaba a la montaña sagrada.

"¡Hermano Shi, vamos allá!" Los ojos de la princesa brillaron exuberantemente. El palacio sagrado era como un destino al alcance de la mano.

Dicho esto, incitó al caballo y galopó hacia el campamento bárbaro cuesta abajo. Shi Mu le dio a The Four Odd un estímulo suave y la siguió.

"¡Quien viene debe parar ahora! ¡No es hora de peregrinar todavía! ¡Cualquiera que se atreva a entrar en la montaña sagrada en el momento equivocado será asesinado indiscriminadamente! ''

Cuando los dos llegaron a la puerta del campamento, fueron rodeados inmediatamente por un grupo de soldados bárbaros que tenían armas en sus manos.

'' Soy la Princesa Baile de Fuego de Qi el País Celestial. En nombre de la Unión de las Siete Sectas, solicito ver al gran chamán en un asunto de gran importancia. La princesa arqueó las cejas y anunció su identidad.

El líder de los guardias era un bárbaro con una diadema roja. El anuncio ciertamente lo sorprendió. Después de una breve vacilación, habló a un compañero bárbaro en un susurro antes de levantar nuevamente la cabeza. No pronunció ni una sola palabra, y miró a los dos humanos normales con más suspicacia. En todo caso, fue el disfraz supremo de los humanos de las vestimentas bárbaras lo que lo despertó.

Después de recibir la orden, el compañero bárbaro se escabulló de inmediato al campamento. Varios minutos pasaron, y un bárbaro de mediana edad con ojos de águila salió de la construcción muy profunda del campamento. Los guardias pronto le abrieron paso con gran prisa. El bárbaro de mediana edad tenía tres plumas rojas ardientes adornadas en su pelo.

"Mi nombre es Ahguna, el principal general de este campamento. Escuché de mi soldado que ustedes dos se llamaron embajadores de la Unión de las Siete Sectas. ¿Tienes alguna prueba? '' Dijo el general con voz fría después de disparar a Shi Mu y a la princesa con cautela.

'' Esta es mi señal que demuestra mi identidad como embajador. Los santos de los siete sindicatos lo han hecho ellos mismos. No hay forma de hacer una imitación. El Gran Chamán sabrá cuando lo vea. "Asumiendo un aplomo tranquilo, la princesa sacó una ficha de jade blanca y afirmó. Esta señal se asemejaba a un deslizamiento blanco a primera vista, pero los oscuros caracteres mágicos impresos en ella demostraron lo contrario, definitivamente no era algo ordinario.

"Hehe, jovencita, el Gran Chamán no es alguien a quien nadie pueda tener el honor de conocer en persona. Demasiado joven y demasiado ingenuo! Muéstrame tu token y luego lo examinaré yo mismo. Si no es falso, se lo enviaré al Gran Chamán ''. Ahguna se burló y respondió.

La princesa se hundió en un silencio vacilante. Ella miró a Shi Mu por ayuda. Shi Mu movió sus labios suavemente, diciendo algo en voz baja. La princesa luego pensó algo y finalmente le arrojó la ficha a Ahguna.

El general bárbaro extendió su mano de manera satisfecha y tomó la ficha con un fuerte agarre. Sin embargo, sin siquiera mirarlo, deslizó la ficha en su abrigo. Inmediatamente, cambió su semblante y adoptó una voz áspera: "¡Espías humanos! ¡Ven y llévatelas!''

Su voz despertó a más de cientos de soldados bárbaros que se apresuraron a salir del campamento. Entre ellos, había al menos diez guerreros totémicos que instantáneamente asediaron a Shi Mu y la princesa, como si realizaran una acción que habían ensayado durante mucho tiempo.

Los soldados por ahora, se habían preparado para un ataque en cualquier momento. Los de la primera fila habían adoptado una pose, listos para arrojar sus lanzas. Los diez y pico de guerreros totémicos también habían comenzado a estimular su poder totémico, sus cuerpos se estaban acelerando rápidamente.

La princesa se mantuvo imperturbable ante tal escenario. Una luz blanca brilló alrededor de su cintura y en elAl momento siguiente, una espada suave y blanca ya estaba en su mano. La espada brillaba con una capa de niebla blanca, bastante alerta.

Sin embargo, Shi Mu ni siquiera cambió su expresión. La espada negra ya brillaba con caracteres mágicos rojos, y la forma en que miraba a Ahguna parecía sugerir la muerte de este último. El labio superior de Shi Mu ligeramente curvado irónicamente.

''¿Qué? Ustedes bastardos quieren pelear? ¡Mira lo que te rodea! '' De algún modo, la penetrante mirada fría de Shi Mu había hecho que Ahguna se sintiera perturbada. Él gritó con una autoridad afectada.

Justo cuando estaba a punto de hacer el pedido, una voz baja y reverberante llegó a sus oídos.

"En este lugar sagrado, Ahguna, ¿cómo te atreves a perturbar el reposo del Gran Shamán? ¿Crees que todavía estás en tu propia tribu, la Serpiente de Fuego? "Un fornido bárbaro salió del campamento de una manera genuinamente autoritaria. Tenía al menos tres metros de alto, llevaba una capa azul y un collar hecho de colmillos azules. En su mano derecha había un hacha gigante azul colgada del hombro, parecía que pesaba al menos mil kilogramos.

Al escuchar sus palabras, los ojos de Shi Mu brillaron mientras buscaba en la parte del cofre de Ahguna donde era más probable que se hiciera un tatuaje. Sus ojos se estrecharon levemente.

"Maestro Ulan, estos dos humanos son los espías que acabo de descubrir. No es inapropiado arrestarlos, creo. "La voz de Ahguna se tambaleó, pero el brazo derecho que acababa de levantar no estaba acostado.

"Maestro Ulan, soy el Príncipe Bailando Fuego de Qi, el País Celestial, el embajador enviado por la Unión de las Siete Sectas. Tengo un problema urgente para informar al Gran Chamán. Ahguna tiene mi token. Por favor, maestro Ulan. '' Después de echar un vistazo al collar alrededor del cuello de Ulan, los ojos de la princesa se iluminaron mientras ella reafirmaba su identidad a toda prisa.

'' Ahguna, muéstrame su ficha. '' Ulan tituló y demandó.

La cara de Aghna se cayó, y en un humor hosco, le pasó a Ulan la ficha de jade blanca.

Ulan lo tomó con frialdad, y luego se colocó la ficha en su frente. Un momento después, él quitó la ficha con una gran sonrisa.

"¡Así que realmente son los embajadores humanos! ¡Bueno! Ustedes pueden retirarse. '' Ulan saludó a los soldados que rodeaban a Shi Mu y a la princesa. Los soldados bárbaros obedecieron inmediatamente y regresaron al campamento.

"Ahguna, ¿todavía quieres echarle un vistazo a esta ficha?" Balanceando la ficha en su mano, Ulan miró a Ahguna a su lado austeramente.

"Me gustaría". Ahguna extendió sus manos para tomar la ficha, respondiendo con la cabeza inclinada. Pero pronto devolvió la ficha, caído y se quedó junto a Ulan sin decir una palabra.

'' Ahguna, un consejo. ¡Como el principal general del Sagrado Palacio, será mejor que prestes atención a tus responsabilidades! Ulan miró directamente a los ojos de Ahguna penetrantemente, y simultáneamente desató el arrogante qi dentro de su cuerpo que pertenecía solo a un santo de Xiantian.

Esta exhibición de poderosa Qi de Xiantian sacudió a Ahguna en una sacudida mientras retrocedía varios pasos, temblando y ruborizándose de vergüenza. A toda prisa, se disculpó y se retiró del escenario como un payaso avergonzado.

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Traducido por: HJ

Editado por: Bobby

Traducido por XianXiaWorld