Beastly Fēi That Go Against The Heaven: Coerced By The Huáng Shū - Chapter 102

¡El rico es el Señor!

(Traducido por: RenRen, Editado por: Yzrahc`dryzzle, Revisado por: Strix)

Esto simplemente no podría ser tolerado, ¡ah!

'' ¡El rico es el Señor! '' Jing Yue levantó las manos y se sentó arrogante en el sofá. Miró a la princesa LeYang con los ojos entornados y dijo: "Esta señora se ha sentado aquí primero, ¿sobre qué base me está diciendo que ceda?"

"Tú ... ¿Cómo te atreves? ¿Sabes quién soy? "Al ver la actitud arrogante de Jing Yue, la princesa LeYang se sintió tan enojada que su rostro se puso rojo. Fue muy difícil para ella poder salir del Palacio para un viaje. No esperaba que hubiera alguien que realmente no se preocupara por su estado y la ignoró al instante.

"Lo sé, ¡ah, eres la princesa LeYang!" Jing Yue parpadeó y, sin el menor cuidado, dijo: "¿No es solo una princesa? No es que nunca haya visto uno antes ".

"¡Te atreves a insultar a la familia real!" Los ojos de la princesa LeYang se abrieron de par en par. Señaló a Jing Yue y gritó: "¡Tú! ¡Créalo o no, esta Princesa dará una orden para matarte! ''

'' Una niña pequeña, grita todo el día para golpear, grita para matar ... Por lo que veo, no te ves como una princesa en absoluto, te ves más como un pícaro en la calle ''. Las esquinas de Jing La boca de Yue se levantó con desdén mientras continuaba: "Además, tu apellido no es Xiao, ¿con qué tipo de familia imperial te cuentan?"

"Tú ...... tú ......" LeYang quedó perplejo ante las palabras de Jing Yue. Nadie se había atrevido a hablarle así. ¿Quién no cedería una vez que escucharon su nombre? ¿Cómo podía esperar que hoy se encontrara con Jing Yue, este tipo de persona?

"No digas demasiada mier**, ¿quieres esta habitación, verdad?", Dijo Jing Yue, con las cejas ligeramente levantadas.

''Sí. Ustedes me dicen, qué hará que acepten irse '', dijo la Princesa LeYang y respiró hondo.

"Dado que este es un lugar para comer, beber y gastar dinero, entonces es fácil, ah ... quién tiene más dinero tiene derecho a hablar". Jing Yue miró radiante a la princesa LeYang y habló. Al lado de Jing Yue, los ojos de ShangGuan LingLan se abrieron de miedo después de escuchar sus palabras. Tocó la bolsa en su cintura y tragó saliva.

Esta fue la primera vez que se encontró con algo como comparar quién tenía más dinero ...

"¿Ha?" La princesa LeYang parecía haber escuchado algo muy ridículo, mirando a Jing Yue de arriba abajo como si estuviera examinando a un idiota. Sin embargo, Jing Yue se enfrentó a la princesa LeYang con una expresión imperturbable.

"Estás diciendo, quieres comparar conmigo, ¿quién tiene más dinero?" Preguntó la Princesa LeYang, mirando a Jing Yue.

"Sí, ahh". Jing Yue asintió seriamente con la cabeza antes de decir: "No necesitamos hablar de nada". Si ahora, en este momento pudieras encontrar más dinero que nosotros, definitivamente empacaremos nuestras cosas y nos marcharemos de inmediato y te llamaremos Princesa con respeto ".

Una vez que la Princesa LeYang escuchó esto, ella accedió instantáneamente sin la más mínima vacilación, '' ¡No hay problema! ''

'' Si pierdes, entonces ... yo tampoco te avergonzaré, solo te quedas en la sala de Jin Yan Lou y gritas '¡Soy un idiota!', Tres veces serán suficientes '', dijo Jing Yue. mirando radiante a la princesa LeYang.

''¿¡Qué!? Tú-!''

Jing Yue levantó su mano para detener las palabras de la Princesa LeYang. Ella provocativamente arqueó las cejas cuando se enfrentó a LeYang y dijo: "¡Xi (suspiro)! ¿Te atreves a comparar o no?

''¿Comparar? ¡Solo compare! ¿Te temería esta princesa? "El tono provocativo de Jing Yue enfureció a la princesa LeYang, que al instante accedió a comparar su dinero. Al escuchar lo que la princesa LeYang había dicho, Jing Yue se levantó bruscamente y dijo: '' Estoy con ella, dos personas, estás con esas personas detrás de ti, ¡combinas el dinero que tenemos y lo comparas! ''

"¡Todos quitan su dinero por esta princesa!", Dijo en voz alta la princesa LeYang con el mentón levantado.

"Sí". Uno a uno, un grupo de guardias imperiales que la seguían sacó sus bolsas y las puso sobre la mesa al costado. Al ver que había plata y yinpiao, los ojos de Jing Yue y ShangGuan LingLan se ensancharon de repente, no sabían por qué, pero de repente perdieron la confianza.

Jing Yue y ShangGuan LingLan se miraron el uno al otro. Sus ojos estaban mostrando desconcierto mientras miraban los plateados y el oro que comenzaba a acumularse.

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