Way Of Choices - Chapter 853

Capítulo 853 - Asalto grupal

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Los asesinos hicieron que el viejo Guardián sintiera un ligero remordimiento.

Ya había adivinado la identidad del sirviente mudo, así que ¿cómo no recordar que todos estos asesinos formaban parte del Pabellón de los Secretos Celestiales, que todos habían sido subordinados de este hombre?

The Guardian respiró hondo y luego le gritó al siervo mudo: "¡Liu Qing, ven a luchar conmigo!"

A pesar de que fue gravemente herido por la emboscada, su voz era atronadora e intimidatoria hasta el extremo, prueba de que era un experto de la generación anterior que ya había dado un paso hacia lo divino.

Los fríos vientos invernales volaron su cabello en desorden.

De hecho, el servidor mudo era Liu Qing, que una vez fue el jefe de la organización asesina del Pabellón de los Secretos Celestiales.

Con la partida de Su Li y el misterioso asesino, fue el asesino más aterrador del continente.

Solo él podía emboscar exitosamente a un individuo tan poderoso, e incluso él había pagado un precio muy alto.

Tang Treinta y Seis se puso de pie y le preguntó a Liu Qing: "¿Todavía estás bien?"

Liu Qing no dijo nada, solo impasible asintió.

"¡Lucha contra tu trasero!"

Tang Treinta y Seis sacudió la nieve de su cuerpo y le dijo al viejo Guardián cubierto de sangre: "Ahora nos toca a todos pelear contra ustedes".

Al decir esto, enérgicamente agitó su mano.

Liu Qing y los siete asesinos atacaron.

Al mismo tiempo, se abrió la puerta de acceso a la sala ancestral y entró aún más gente.

El intento de espada audaz y atemorizante ocasionalmente dejaría una marca en las paredes de la sala ancestral.

Ballestas y armas secretas silbaron en el aire.

La sangre estaba en todas partes. Parecía que las paredes blancas tendrían que ser pintadas de nuevo.

Después de un tiempo, todo el ruido se calmó y el salón ancestral volvió a estar en calma.

Fue extremadamente tranquilo. Se podía escuchar los copos de nieve golpeando el suelo, la respiración rápida de las personas en el patio.

Los alrededores estaban salpicados de sangre. Todos fueron heridos, y Tang Treinta y Seis no fue la excepción. Dos de sus costillas estaban rotas.

Para atraer la atención del viejo Guardián, no se había permitido retirarse a la parte de atrás.

Los hechos demostraron que su método fue efectivo. Ninguno de los atacantes había muerto.

El viejo Guardián estaba muerto. Su cuerpo se apoyó contra la mesa de incienso dentro de la sala ancestral, cubierto de heridas y sin sangre, su extremo extremadamente miserable.

Sus ojos seguían abiertos, un leve arrepentimiento y confusión aún visibles dentro de ellos.

......

......

Las personas que habían venido para ayudar eran todas las personas de la rama principal del clan Tang.

En este medio año, no se arrojaron más rocas sobre la pared, no volaron cometas en el cielo, pero como el sirviente mudo era Liu Qing, Tang Treinta y Seis naturalmente había podido mantener comunicaciones cercanas con la rama principal. Las residencias alrededor de la sala ancestral habían sido confiscadas secretamente por la rama principal. Estaban esperando su momento para moverse.

Pero Tang Treinta y Seis realmente no había esperado que el viejo Guardián se convirtiera en el hombre del Segundo Tío.

Si Liu Qing no hubiera estado aquí, seguramente habría muerto.

Tang Treinta y Seis hizo que la gente de la rama principal se retirara de la sala ancestral, y luego le dijo a Liu Qing: "Mi ídolo, te he molestado durante este medio año".

Conoció al legendario asesino por primera vez durante la Cumbre de ebullición celebrada en Mount Han.

En ese momento, Liu Qing quería que Chen Changsheng se convirtiera en el nuevo líder de su organización de asesinos. Chen Changsheng naturalmente no estuvo de acuerdo.

Tang Treinta y Seis quería hacerlo, y quería establecer un método de comunicación con Liu Qing.

Chen Changsheng era muy consciente de sus intenciones y se negó.

Pero cuando Tang Treinta y Seis fue encarcelado en la sala ancestral, las circunstancias cambiaron, por lo que Chen Changsheng, naturalmente, pensó de manera diferente.

Por lo tanto, Tang Treinta y Seis estableció comunicaciones con Liu Qing.

Liu Qing dijo inexpresivamente: "Es solo realizar servicios por remuneración".

Tang Treinta y Seis preguntó de repente: "¿Alguna vez has pensado en ser el Guardián de mi clan Tang?"

Liu Qing lo miró y luego respondió: "Lo discutiremos cuando te conviertas en cabeza del clan".

Para proteger a Tang Treinta y Seis durante medio año, Liu Qing fingió ser un servidor mudo enel salón ancestral, por lo que, naturalmente, no podía hablar.

Ya fuera antes o detrás de la gente, en el patio delantero o trasero, o incluso cuando dormía solo en el cuarto oscuro, no dijo una sola palabra.

Esta fue una hazaña increíblemente difícil.

También fue desde ese día en adelante que Tang Treinta y Seis ya no habló.

Algunas personas en el clan Tang creían que esto era por desesperación, mientras que otros pensaban que se trataba de una protesta silenciosa.

Nadie sabía que solo quería un tiempo tranquilo para autoexaminarse mientras acompañaba a Liu Qing.

Tang Treinta y Seis miró a los asesinos heridos y dijo: "Cuando me convierta en cabeza del clan, los apoyaré a todos por el resto de sus vidas".

Estos asesinos habían pertenecido originalmente al Pabellón de los Secretos Celestiales y ahora estaban subordinados a la Corte Imperial. Hoy, habían seguido las órdenes de Liu Qing, que no era diferente a la traición. Seguramente tendrían que enfrentar la búsqueda incondicional de la Corte Imperial. Estaban acostumbrados a vivir en la oscuridad, pero ¿quién estaría dispuesto a ser un fantasma solitario por el resto de su vida?

Las palabras de Tang Treinta y Seis fueron muy sencillas. Aunque parecía algo distante, todavía era una promesa.

Los asesinos lo asintieron con la cabeza, usaron sus ojos para buscar instrucciones de Liu Qing, luego desaparecieron en la tormenta de nieve.

Liu Qing le preguntó a Tang Treinta y Seis: "¿Qué debería hacerse después?"

Tang Treinta y Seis miró en silencio la puerta ahora cerrada de la sala ancestral, y luego dijo: "Espera".

Liu Qing lo miró sin decir nada y luego salió de la sala ancestral.

Todos se habían dispersado.

El salón ancestral solo lo contenía a él y un piso plagado de cadáveres.

Caminó hacia los escalones de piedra, apartó el cadáver del viejo Guardián de la mesa de incienso y tendió una nueva alfombra de oración.

La nieve cayó silenciosamente en el patio.

Se sentó en la alfombra de oración, mirando la nieve más allá de la puerta, esperando tranquilamente la conclusión final.

......

......

Los eventos de la sala ancestral fueron transmitidos muy rápidamente a la antigua finca.

Chen Changsheng miró la nieve afuera, la expresión de su rostro se relajaba gradualmente, al igual que las ciruelas de invierno que se sacudían en la espesa nieve. Fue brillante y agradable.

El mayordomo de la vieja propiedad miró al segundo maestro Tang y bajó la cabeza, diciendo: "El joven maestro tenía algunas palabras para el segundo maestro".

El segundo maestro Tang no dijo nada. Miró los azulejos dispersos en la mesa, aparentemente perdidos en sus pensamientos.

El viejo maestro Tang preguntó: "¿Qué chistes tiene este niño para decir?"

Al escuchar esto, Chen Changsheng se dio la vuelta y miró al viejo maestro Tang.

De esta forma de dirección, uno podría decir claramente que la actitud del Maestro Antiguo Tang hacia Tang Treinta y Seis ya había cambiado.

Nadie conocía los detalles específicos del asesinato en la sala ancestral, pero sin duda había sido sangriento y cruel.

Todos, incluido Tang Old Master, creían que Tang Treinta y Seis sería asesinado por el segundo maestro Tang. Aunque Chen Changsheng sabía que Liu Qing siempre estaba al lado de Tang Treinta y Seis, aún sentía que la situación era increíblemente peligrosa.

Pero el resultado del asesinato fue completamente diferente de lo que todos esperaban.

El mayordomo dijo en voz baja: "El joven maestro dijo: 'Los asesinos son mejores cuando se los cría usted mismo. Los que otros le dan no son suyos al final, y lo mismo se aplica a las capacidades de uno'".

Estas palabras fueron algo desordenadas. ¿Qué capacidad fue referida?

Otras personas no podían entender, pero el segundo maestro Tang podría.

Después de enterarse de los eventos en la sala ancestral, aún fue capaz de mantener una apariencia tranquila, sin importar cuán profundamente sorprendido estuviera.

Ahora, sin embargo, al escuchar las palabras de Tang Treinta y Seis, ya no pudo seguir así, y su tez instantáneamente palideció.

No importa cuán excesivamente inteligente era uno, cuán hábil era maquinar, si la fuerza de uno no era suficiente, si uno siempre tenía que recurrir a actuar a través de otras personas, los problemas surgirían tarde o temprano.

Recordó las palabras que Wang Po le había dicho hacía tres años en la calle nevada, las palabras que Zhexiu le había dicho hacía dos días en la iglesia taoísta, y no pudo evitar sentirse un poco distraído. ¿Estaba realmente equivocado durante todos estos años?

El ministro Wei no vino. Los que vinieron fueron los tímidos jóvenes de la cámara de tortura.

El segundo maestro Tang fue llevado.

Nadie sabía dónde sería encarcelado, cuándo volverían a verlo en público o si podría morir esta noche.

Era exactamente como esas palabras que el viejo Guardián recordaba cuando miraba a Tang Treinta y Seis en la sala ancestral.

El clan Tang caminó por el camino de los mercaderes. El ganador festejaría mientras el perdedor se quedaría sin nada. Así que va.

Y fue como el mensaje de Tang Treinta y Seis al Tang Old Master. Todo estuvo a su discreción. No se necesitaban pruebas, ni era necesario discutir la razón de verdad.