Ze Tian Ji - Chapter 665

Capítulo 665 - La oscuridad antes del amanecer

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Chen Guansong poseía un estatus extremadamente alto dentro del Gran Ejército Zhou y era extremadamente hábil para soportar pacientemente. Obteniendo la profunda confianza de la emperatriz divina, él había manejado la Academia Star Seizer por muchos años, muchos de sus estudiantes y discípulos sirviendo en el ejército. Su fuerza era insondable, y hacía mucho tiempo que estaba a medio paso de lo divino. En esta rebelión temprana de otoño, jugó un papel extremadamente importante. Si no ocurría nada fuera de lo común, estaba seguro de convertirse en el líder del Gran Ejército Zhou en el futuro, ascendiendo hasta el más alto precipicio de poder junto con Shang Xingzhou, incluso convirtiéndose en comandante en jefe de la expedición norte del Ejército Zhou contra los demonios.

Sin embargo, cuando la victoria fue justa ante sus ojos, murió.

Murió miserablemente, quemado por las verdaderas llamas del Fénix celestial. Además, no murió inmediatamente, sino que ardió durante mucho tiempo antes de dejar de respirar por fin.

Antes de su muerte, experimentó la tortura más dolorosa en todo el mundo humano.

Porque esta fue la venganza de la emperatriz divina Tianhai.

Antes de dejar este mundo, se había vengado por sí misma.

Al mismo tiempo, ella también había tomado venganza por sus subordinados fallecidos y leales.

Con un roce de su manga, transformó el cuerpo del divino General Tian Chui en una llama, confiriéndole la gloria de regresar con ella al mar de estrellas.

Luego, se alejó decenas de miles de li, una vez más oscureciendo el cielo estrellado. Al entrar en la corriente, le dio una palmada al monje.

Una cantidad ilimitada de luz de las estrellas cayó junto con su palma. Aunque no pesado, fue incomparablemente profundo e imposible de evitar.

El monje volteó su palma y la levantó para encontrarse con la de ella. Un aullido provenía de la montaña solitaria en medio de la espesa niebla detrás del arroyo, mezclándose con el silbido de sus palmas.

Las dos palmas se encontraron y el monje entendió sus intenciones y preguntó: "¿No estás dejando una sola semilla?".

"Tenemos un sucesor", respondió la emperatriz divina Tianhai.

El monje creía que ella estaba hablando de Xu Yourong.

En verdad, ella no era, o no era solo ella.

"Mi señora es realmente una persona extraordinaria".

El monje miró a la emperatriz divina Tianhai, la sangre comenzó a fluir de sus ojos.

Esta fue la primera vez que mostró reverencia a la emperatriz divina Tianhai.

Luego, su cuerpo desapareció repentinamente, transformado en innumerables fragmentos de luz que desaparecieron en la Tumba de las Nubes.

A una distancia incalculable, en el otro mundo, en un desierto donde la arena brillaba como el jade, se encontraba un enorme altar de sacrificios.

El monje se sentó sobre el altar del sacrificio, con las piernas cruzadas.

Decenas de miles de creyentes estaban arrodillados en el desierto alrededor del altar de los sacrificios, con las manos en alto hacia el cielo. Su piedad era como una embriaguez, una obsesión, una locura, una locura.

De repente, una energía mental de otro continente envolvió todo este mundo y presionó hacia el suelo.

El monje abrió los ojos. Sus pupilas eran de un negro profundo. Dos flujos de sangre comenzaron a filtrarse por las comisuras de sus ojos, y luego todo su cuerpo comenzó a sangrar.

Diez extraños sacerdotes alrededor del altar del sacrificio explotaron. Los creyentes gritaron en estado de shock y comenzaron a llorar.

Innumerables personas habían muerto. El desierto estaba manchado de rojo.

......

......

En el momento final de su vida, la emperatriz divina Tianhai no actuó como muchos habían imaginado, convirtiendo sus últimas partes de vida en una energía enloquecida y matando a las personas que no le gustaban.

El Papa dejó su Hoja Verde, pero ella no atacó.

Han Qing había renunciado a toda resistencia, pero ella no atacó.

La casa solariega del clan Tianhai estaba en silencio, pero no atacó.

Su lanza destruyó el pabellón de Lingyan, un cepillo de su manga quemó a Chen Guansong hasta la muerte, y luego quemó el resto de su vida para derrotar por completo al monje.

Porque el monje vino del Continente de Luz Sagrada.

Solo después de muchos años, cuando la gente de este mundo comenzó a comunicarse con la otra raza en el Continente de Luz Sagrada, la gente finalmente entendió lo que significaba en esa temprana noche de otoño cuando la Emperatriz divina derrotó la proyección de ese monje desde la Luz Sagrada Continente, y cuánto tiempo había ganado para la gente de este mundo.

Por supuesto, la emperatriz divina Tianhai no era una buena persona en el sentido común de la palabra, y mucho menos un gobernante virtuoso.

Ella había hecho este tipo de elección en sus últimos momentos porque, en los últimos años, se había estado preparando para llevar a cabo precisamente esta tarea.

Aunque este mundo ya la había traicionado, aún persistía en la creencia de que este era su mundo.

Este es Nuestro mundo.

Dado que es Nuestro mundo, naturalmente cae sobre Nosotros para protegerlo.

Cualquiera que sea lo suficientemente valiente como para extender una mano hacia Nuestro mundo lo cortará.

Ella pensó de esta manera, por lo que actuó de esta manera, y entonces lo hizo.

......

......

Está hecho.

Fue terminado.

La emperatriz divina Tianhai regresó a la cima del Mausoleo de los Libros.

Después de terminar la inspección de su mundo, finalmente tuvo el placer de mirar a su lado.

Chen Changsheng estaba a su lado.

Desde hace bastante tiempo, el Chen Changsheng que había sido olvidado por el mundo entero siempre había estado a su lado.

Tal vez por empatía con un compañero que sufría, nunca había olvidado que él estaba a su lado.

Desde el momento en que el divino general Han Qing lanzó su lanza traidora, a su conversación, a su inspección final de su mundo, había transcurrido una cantidad de tiempo extremadamente corta.

Además, el cuerpo de Chen Changsheng estaba algo rígido, por lo que aún mantuvo su postura desde ese momento.

Su rodilla izquierda estaba ligeramente doblada, su mano izquierda agarraba la Vault Sheath, y su mano derecha sostenía la Stainless Sword.

Ninguna persona notó esta vista.

Al principio, cuando el Frost God Spear había llegado a la cima del Mausoleo de los Libros, había adoptado esta postura.

En ese momento, no estaba presente el cuerpo, Dao o el alma de la emperatriz divina Tianhai. Nadie estaba allí para protegerla.

La Lanza del Dios Escarchado había venido.

Ni siquiera pensó en las llamadas facciones, en cómo no eran madre e hijo, y en todos esos otros problemas. Instintivamente se apoderó de su espada, queriendo bloquear esta lanza por ella.

No se había recuperado de sus heridas y su cuerpo era extremadamente débil, pero tenía varios miles de espadas famosas en su vaina y la cadena de perlas de piedra.

Sin embargo, esta era la Lanza del Dios Escarchado.

Esta fue la lanza divina de Han Qing.

Antes de que tuviera tiempo de hacer la más mínima respuesta, la lanza perforó el cuerpo divino de la emperatriz Tianhai como un rayo.

Solo podía ver como ocurría esta escena, sin poder hacer nada.

Su espada no pudo llegar, solo sus intenciones.

'' ¿Querías salvarnos? ''

La emperatriz divina de Tianhai arqueó levemente sus cejas.

Chen Changsheng no sabía qué decir.

"¿Todo por ti mismo?" Se burló la emperatriz divina de Tianhai.

Inmediatamente después, las alas negras de Phoenix desaparecieron con la brisa.

De repente, la sonrisa burlona en su rostro se desvaneció en la nada y ella colapsó hacia atrás.

Chen Changsheng se adelantó y la sostuvo contra su pecho.

La emperatriz divina de Tianhai levantó la vista hacia el vasto cielo de estrellas, una expresión irritada apareció en su rostro como si fueran demasiado deslumbrantes.

Él se acurrucó a su alrededor, bloqueando la luz de las estrellas detrás de él.

Al igual que su primer encuentro con aquellos hace varios años.

En aquel entonces, en el Palacio Imperial, junto a la piscina, cuando esa ardilla pasaba corriendo, la había abrazado y había acurrucado su cuerpo a su alrededor, bloqueando la maceta que no le cubría la espalda.

La lluvia comenzó a caer una vez más desde el cielo nocturno, un suave golpeteo en el suelo.

Las brillantes e incontables estrellas estaban arriba.

En el horizonte lejano, se podían ver rayos de luz extremadamente tenues, pero el pico del Mausoleo de Libros era oscuro sin comparación.

La interminable noche finalmente estaba a punto de pasar, el amanecer se acercaba rápidamente.

Chen Changsheng podía sentir el Qi en la base del Mausoleo de Libros y sabía que su maestro ya había llegado.

"Te llevaré", le dijo.

'' ¿Y a dónde nos llevarás? ¿El jardín de Zhou? "Ella se burló de él.

Solo entonces Chen Changsheng se dio cuenta de que la Emperatriz siempre había sabido todo.

"No vamos a ir a ese lugar fantasmal donde ni siquiera se ve el sol".

La emperatriz divina de Tianhai miró hacia el este a esa mancha de luz de la mañana e indiferentemente dijo: "Este lugar está bastante bien".