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Ze Tian Ji - Chapter 566

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Capítulo 566 - Hay un pez en el Monte Han

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Incontables huellas de repente aparecieron como estrellas en la tierra quemada del Myriad Willows Garden.

La figura de Guan Xingke ya se había desvanecido, tal vez ya había partido del condado de Tianliang.

Zhu Luo miró a lo lejos, su rostro se llenó de complejas emociones.

¿Realmente se había ido al Monte Han?

En el pasado, sin duda se habría apresurado junto con Guan Xingke a Mount Han.

Al igual que los otros expertos del continente que acababan de recibir la convocatoria del Anciano de los Secretos Celestiales.

Pero ahora, él era viejo, herido, simplemente incapaz de apresurarse.

De repente, sintió una pizca de arrepentimiento por ese asunto del año pasado en la ciudad de Xunyang.

Si no hubiera ido a matar a Su Li, hoy hubiera tenido la oportunidad de matar a esa persona.

¡Ah, esto era realmente lo que debería haber hecho!

¡Incluso si él muriera, todavía lo habría hecho!

......

......

Las figuras que volaban velozmente hacia el Monte Han no eran muchas, pero todas eran expertas supremas en el mundo humano.

En las lejanas costas del Río Rojo, la majestuosa e imponente Ciudad del Emperador Blanco todavía estaba en paz y todo continuaba igual de bien. La única característica extraña era esa nube blanca que colgaba sobre las paredes de la ciudad.

En el Palacio Imperial, la luz del verano brillaba sobre la plataforma de rocío. A la luz del día, esas perlas nocturnas seguían siendo tan deslumbrantemente radiantes como siempre.

La emperatriz divina de Tianhai permanecía en esta luz, mirando a lo lejos, su expresión indiferente, sus pensamientos inescrutables.

En el palacio sereno en las profundidades más profundas del Palacio Li, el Papa miró en silencio a la Hoja Verde frente a él, sus pensamientos también inescrutables.

En las llanuras nevadas al norte del Monte Han, aunque era pleno verano, el viento helado todavía se enfriaba hasta los huesos y las ventiscas soplaban sin fin.

Un hombre se paró en la ventisca. Si uno no camina cerca, simplemente sería imposible darse cuenta de su existencia.

Porque estaba vestido de blanco, desde el pelo hasta la ropa, todo blanco hasta el extremo.

......

......

En el Monte Han, el erudito de mediana edad miró a esos Heavenstones flotando en el cielo. Se calló, ya no conversaba con el Anciano de los Secretos Celestiales en la cumbre.

¿Podría ser esto también una trama establecida por humanos y semihumanos?

Las piedras flotaban suavemente en el cielo.

Varias docenas de piedras, que llevaban musgo, agua y grava, flotaban alrededor de su cuerpo, creando una escena bastante extraña.

......

El erudito de mediana edad sabía lo que el Anciano de los Secretos Celestiales quería hacer.

Él creía que esto no era una trama de los humanos, porque incluso tan tarde como la noche anterior, ni el Consejero Militar ni él mismo podrían haber sabido que aparecería hoy en el Monte Han.

Después de sufrir la derrota en los Llanos Centrales hace tantos años, regresó a la ciudad de Xuelao y no volvió a emerger durante lo que ahora era mil años.

Una figura poderosa en su nivel comprendió su propio destino. Sus palabras, acciones y pensamientos coincidieron con el Dao celestial, lo que hace que sea muy difícil para él figurar en una trama.

White Emperor City estaba demasiado lejos y también estaba muy seguro de que Tianhai y el Papa estaban en la capital.

Pero si realmente se demoró demasiado tiempo en Mount Han por este conjunto de Heavenstone, la situación realmente podría cambiar.

Nunca le había gustado el cambio, porque el cambio a menudo era problemático.

Ahora, era su turno de hacer una elección.

¿Debía aprovechar el hecho de que todavía no se había producido ningún cambio para usar toda su fuerza para hacer añicos la formación y abandonar Mount Han, volviendo a su territorio? ¿O debería detenerse un poco más y primero realizar esa tarea?

El Anciano de los Secretos Celestiales había decidido sacrificar a esos cultivadores humanos y expertos semihumanos en el camino de la montaña y por la corriente para encarcelarlo dentro del Monte Han. Había tomado esta decisión muy rápidamente, pero presumiblemente había habido alguna duda.

Para él, sin embargo, no había necesidad de dudar en este momento, o incluso la necesidad de elegir.

Porque en su opinión, lograr esta tarea no tomaría demasiado tiempo.

En su opinión, esa juventud realmente no era muy diferente de una hormiga, incluso si este joven era un genio cultivador que había conmocionado a todo el continente.

Ya no le prestó atención a esos Heavenstones que brokear el viento y la nieve, retirando su mirada hacia el camino de la montaña.

Chen Changsheng y los otros cultivadores humanos estaban en el camino de la montaña.

Estaba muy tranquilo, con una sonrisa casi intangible colgando de sus labios.

Cuando la mirada del erudito de mediana edad descendió una vez más, la gente en el sendero de la montaña se sumió en la desesperación.

En la hierba junto a la corriente, Liu Qing también se desesperó.

Incluso Zhexiu y Tang Treinta y Seis habían perdido la esperanza.

Chen Changsheng no. Mientras miraba al sonriente y silencioso erudito de mediana edad, inexplicablemente pensó en una persona en la que realmente no debería haber estado pensando en este momento.

La mujer de mediana edad que una vez se había sentado frente a él en el Jardín de las Cien Hierbas, bebiendo té.

No sabía si lo era o no porque los dos no hablaban, pero sentía que el erudito de mediana edad y la mujer de mediana edad eran algo similares.

Por supuesto, sabía que definitivamente estaba equivocado.

Porque él sabía quién era este erudito de mediana edad.

Él sabía lo que había venido a hacer.

Esa noche, cuando tenía diez años, su hermano mayor se había avivado durante toda la noche. Más tarde, su superior le dijo que solo un Santo sería capaz de resistir la avaricia y el anhelo de su carne.

En los años siguientes, prestó mucha atención a ocultar la peculiaridad de su cuerpo hasta el Jardín de Zhou, cuando el Gran Peng y Nanke olieron ese aroma.

El erudito de mediana edad era el padre de Nanke, así que tal vez él había descubierto algo de ella.

Y él, naturalmente, no era santo.

Él era un demonio.

Chen Changsheng sintió que en la mirada de este erudito de mediana edad, estaba desnudo, acostado sobre una tabla de cortar húmeda, con el vientre ya abierto y todo su cuerpo manchado de sangre.

No tenía miedo, pero realmente le tenía miedo a este tipo de sentimiento.

No deseaba ser un pedazo de pescado para ser comido.

......

......



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