Way Of Choices - Chapter 1015

Capítulo 1015 - Invito al Emperador Blanco a ver a todos los seres vivientes

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Incontables miradas cayeron sobre el acantilado negro, sobre Chen Changsheng, pero nadie se atrevió a hablar ni a dar un paso adelante y molestarlo.

Linghai Zhiwang había declarado antes alto y claro que cualquiera que se atreviera a dar un paso hacia el acantilado negro sería considerado como un asesino.

El primer ministro y el líder del clan Shi se miraron el uno al otro. No había felicidad en sus ojos, solo preocupación e inquietud.

La preocupación se debía a que nadie sabía lo que verían una vez que Chen Changsheng abriera este acantilado negro. Si fue el peor resultado, ¿qué harían? ¿Los generales, ministros y tribus que los apoyaban se inclinarían casi inmediatamente a los pies de la emperatriz?

La inquietud surgió de dos fuentes.

Como la tribu más grande y más fuerte en la raza Demi-humana, ¿por qué el clan Xiang continuó apoyando a la señora Mu?

¿Y por qué la señora Mu no había hecho nada para detener todo esto, solo la observaba en silencio mientras rompían la formación?

......

......

No todos habían ido a las montañas Starfall.

En el patio de arenas amarillas, el joven Señor de los Demonios inspeccionó tranquilamente esas dos estatuas de piedra, que habían vuelto a sus lugares junto a la puerta trasera. Era imposible decir lo que estaba pensando.

En la finca cercana, el líder del clan Xiang miró a su propio hijo. Vaciló por un largo tiempo, pero finalmente decidió no decir nada.

En la sala de piedra en el punto más alto de la Ciudad Imperial, Luoluo se sentó junto a una ventana, en silencio esperando algo.

En un pantano en lo profundo de las montañas, Chusu lamió su tocón herido, su cuerpo temblaba de dolor.

En ese pequeño patio al lado del templo Celestial Tree, Xuanyuan Po se sentó en el porche de su casa, mirando inexpresivamente ese pequeño montículo.

En una posada común, después de soportar una noche de insomnio, Xu Yourong usó agua para lavarse la cara, luego se sentó frente al espejo de bronce y comenzó a peinarse.

Una voz melancólica salió del espejo de bronce.

"Como todavía estás debajo de las estrellas, ¿cómo no puedes ver a todos los seres vivos?"

......

......

En el lago, en lo alto de las nubes, en lo alto de las montañas, innumerables espadas brillan brusca y simultáneamente desaparecen.

Un agudo aullido resonó en el aire.

Innumerables resplandores de espada regresaron a la vaina.

Chen Changsheng agarró el medio de la funda y se levantó.

Todos lo miraban.

Pero él estaba mirando el lago, las nubes, las montañas.

Las espadas habían regresado, pero las intenciones de su espada todavía estaban allí.

Una bandada de gansos voló sobre el pico nevado pero de repente se vio obligada a descender.

Una brisa marina soplaba desde las montañas pero se reducía a mechones.

Algunas nubes a la deriva en el cielo azul fueron desgarradas por una potencia invisible en hilos que gradualmente desaparecieron.

Estas eran todas señales de que el sello se estaba colapsando.

Solo después de confirmar estas cosas, Chen Changsheng volvió su mirada al negro acantilado.

¡Auge!

Innumerables estampidos estruendosos vinieron de lo profundo del acantilado negro y negro, incluso a gran profundidad.

El suelo tembló y el lago se sacudió y giró. Una montaña cercana derramó su capa de nieve mientras las bestias lloraban tristemente.

Las rocas fueron enviadas volando mientras el polvo explotaba. Tomó bastante tiempo para que todo se arreglara gradualmente.

El acantilado negro había desaparecido, dejando solo un enorme foso, varios cientos de zhang de ancho.

En su parte inferior había una pared de piedra increíblemente lisa, aparentemente hecha de jade o dorado. Pero también parecía que incluso la espada o la espada más afiladas no dejaría una sola marca en su superficie.

Este fue el legendario Starstone, que posee un peso y una densidad inimaginables. Ahora, sin embargo, fue enterrado bajo tierra y grava, revelando solo una pequeña porción del mundo exterior.

Un camino recto se levantó desde detrás de la Piedra Estelar.

El enorme foso que una vez fue el acantilado negro se dividió en dos por este camino de piedra.

Este camino fue extremadamente largo, extendiendo muchos li en la distancia.

Innumerables miradas seguían el camino de piedra, que finalmente terminaba a unos diez li de distancia.

Allí, media montaña se había derrumbado.

Esta montaña realmente había sido un palacio.

Una silla de piedra fue colocada en la media montaña.

Esta silla de piedra tenía diez zhang de altura y diez zhang de ancho, masiva a un nivel exagerado.

Una persona se sentó en estosilla.

Esta persona llevaba un vestido imperial blanco. Él era extremadamente delgado, sus ojos hundidos. Parecía un cadáver.

......

......

"¡Su Majestad!"

Un grito de sorpresa se elevó de la multitud.

Fue seguido por muchos más.

El aire aulló.

Innumerables figuras, temerosas de ser las últimas, corrieron hacia esa mitad de la montaña a diez o algo de distancia.

La advertencia previa de Linghai Zhiwang había sido limpiamente olvidada.

Cuando uno se acercaba a la enorme silla de piedra, se sentía como si la persona sentada en ella fuera muy pequeña, casi a un nivel cómico.

Pero esos ministros y expertos semihumanos no pensaban eso. Sus caras estaban llenas de emoción, y algunos incluso comenzaron a llorar.

Para ellos, la persona en la silla era Dios.

Incluso si esa persona estaba arrugada, sus ojos se cerraron, tan débil que parecía estar respirando por última vez.

Pero mientras estuviera vivo, no, incluso si estuviera muerto, seguiría siendo el Dios de la raza Demi-humana.

Porque se llamaba Bai Xingye.

Él era el emperador blanco.

......

......

Era obvio que los personajes importantes de la raza Demi-humana se habían preparado para tal espectáculo.

Varios famosos médicos semihumanos fueron transportados a la silla de piedra por buitres negros, donde comenzaron a diagnosticar al Emperador Blanco.

Al ver que los ojos del Emperador Blanco todavía estaban cerrados, Xiaode se puso algo ansioso y preguntó: "¿Dónde está Su Santidad el Papa?"

Todos sabían que las habilidades médicas de Chen Changsheng eran inigualables. En su opinión, ni siquiera el mejor médico semihumano era igual a Chen Changsheng.

El primer ministro y los otros dieron vuelta, y luego se congeló.

No vieron a Chen Changsheng.

Chen Changsheng todavía estaba a diez li de distancia.

Todavía estaba donde había estado el acantilado negro.

......

......

Viendo la actividad en la distancia, Chen Changsheng ordenó de repente, "Ve".

Mientras decía esto, su mirada permaneció fija, la mirada fija permanecía fija en la enorme silla de piedra, en la cara del Emperador Blanco.

Esta era la primera vez que veía al Emperador Blanco. Por esto, él había trabajado durante muchos días y noches.

Pero en su primera mirada al Emperador Blanco, decidió irse.

Para irse de inmediato.

La multitud quedó estupefacta ante las palabras de Chen Changsheng, confundida sobre por qué estaba haciendo esto.

Solo el ciego cítara parecía entender las intenciones de Chen Changsheng. Dirigiendo a Fivekind Man, se dirigió hacia el camino secreto detrás del lago.

......

......

Justo cuando un médico anciano había armado coraje y estaba a punto de insertar la aguja de piedra en su mano, el Emperador Blanco abrió los ojos.

Sus ojos eran muy tenues.

Eran como llanuras nevadas en un día nublado.

Un blanco ceniciento

Un pequeño punto negro apareció en la llanura de nieve.

El punto negro comenzó a aumentar de tamaño, su tono se hizo más profundo. Era como un viajero que había cruzado diez mil li de llanuras nevadas que se acercaba.

Él realmente se despertó.

Podría haber estado sellado durante cinco años, con Starstone chupando su resplandor de estrellas y su esencia bestial. Ya estaba débil al extremo, en su último aliento.

Pero cuando abrió los ojos, una energía insondablemente majestuosa surgió de su cuerpo.

"¿Todos ustedes vinieron?"

Su voz era muy suave, y como no había bebido agua durante algún tiempo, era bastante ronca.

Pero todas las Montañas Starfall podían oír su voz.

Como una marea, los expertos semihumanos se arrodillaron.