Capítulo 961 - Las montañas de otoño, la fuente de la confianza
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
Bie Yanghong notó que Xuanyuan Po no tenía palillos, por lo que preguntó preocupado: "¿No estás comiendo?"
Sabía que Xuanyuan Po había participado en la ceremonia de la Selección Celestial hoy, pero no había preguntado al respecto. Él sabía el resultado solo por mirar la expresión de Xuanyuan Po.
Estaba más preocupado por el hecho de que Xuanyuan Po iría a los Celestial Trees mañana para recibir el bautismo del Wildfire. ¿Cómo se le podía permitir no comer hasta la saciedad esta noche?
"Tengo algo para comer".
Xuanyuan Po sacó una bolsa de papel de su seno. Tomando el bollo de carne sobrante de dentro, lo comió con medio plato de sopa de verduras.
Wuqiong Bi se congeló ante esta visión, luego lo ignoró, bajando la cabeza para comer.
Después de un rato, levantó la cabeza para echar un vistazo y se dio cuenta de que Bie Yanghong había estado observando el moño en las manos de Xuanyuan Po todo el tiempo. Ella no pudo evitar fruncir el ceño.
El pan estaba frío y duro, los jugos congelados en grasa blanca. Debería haber sido muy desagradable comer, entonces ¿por qué su marido estaba tan obsesionado con eso?
......
......
El cielo estaba oscuro, los senderos del pino envueltos en la oscuridad más profunda, pero Xuanyuan Po ya estaba despierto.
Salió del callejón, indicó a los sacerdotes alarmados que todo estaba bien, luego se dirigió a la calle cercana para comprar una bolsa de bollos de carne, media olla de gachas, dos tazones de pasta de maíz, un plato de fideos secos, dos pasteles de arroz pegajoso, una bandeja de panecillos al vapor y tres tipos de verduras en vinagre. Esto a remolque, regresó al pequeño patio.
Todavía estaba comiendo bollos de carne, mientras que el resto estaba destinado a Bie Yanghong y Wuqiong Bi para comer durante todo el día.
Bajo la mirada profunda de Bie Yanghong y enojada de Wuqiong Bi, Xuanyuan Po comió en silencio seis bollos de carne. Después de limpiarse, arreglarse la ropa y doblegarse solemnemente a Bie Yanghong, tomó la Espada del Mar de la Montaña de la pila de madera y salió del pequeño patio una vez más.
A diferencia de ayer, atrajo muchas miradas más hoy.
Varias docenas de sacerdotes de la Iglesia Daoista de los Desiertos Occidentales y un centenar de guerreros de la tribu Oso lo acompañaron a Jade Jing Ferry.
Xuanyuan Po notó que el mayordomo del clan Tang y varios cultivadores del sur lo seguían desde una distancia cercana.
Él se había encontrado con estos cultivadores anoche. Según la introducción del administrador, uno de ellos era del monasterio Gentle Stream, aparentemente el tío marcial de Ye Xiaolian de cuando ella todavía estaba en la secta exterior.
La niebla de la mañana cubría a la Ciudad del Emperador Blanco, tal como lo había hecho en todos los demás días durante los incontables años. Jade Jing Ferry también estaba tan animada como siempre, aunque el muelle mejor posicionado ya no estaba ocupado por agricultores trabajadores, sino por funcionarios de la Corte Demi-humana y personajes poderosos como el líder de la tribu Bear.
El sol de la mañana estaba completamente cerrado por las montañas en la orilla opuesta. Esto, junto con la espesa niebla, hacía que pareciera que aún era de noche.
Cuando abordaron el ferry, el Río Rojo de repente se llenó de olas. El ferry se balanceó ligeramente, y luego un rugido bajo y aterrador se elevó.
Los visitantes que escucharon estos rugidos y sintieron las furiosas olas del Río Rojo temblarían de miedo, pero todos los presentes habían vivido en White Emperor City durante bastante tiempo. Sabían que estas eran señales de que los Jing habían despertado y que estaban comiendo. Estaban completamente despreocupados, y después de que varias cajas de las barracudas más empinadas fueron arrojadas al río, los rugidos desaparecieron rápidamente.
La niebla matutina se dispersó gradualmente y ya era posible ver el río circundante, liso y plácido.
Las montañas en la orilla opuesta todavía estaban envueltas en la niebla. A pesar de que el sol estaba a punto de elevarse sobre la cresta, solo se veían las siluetas de esos nueve Celestiales.
La proa del ferry se rompió a través de las aguas, acompañada por el chapoteo de las olas y el aumento de la carrera. Para cuando el ferry llegó a la otra orilla, el sol de la mañana ya estaba emitiendo sus cálidos rayos de luz, las brumas habían sido completamente expulsadas.
Delante de sus ojos estaban las Read more ...