Capítulo 928 - La última lección
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
Las intenciones de la espada eran silenciosas, pero no menos intimidantes. Incluso usar el sentido espiritual de uno para percibirlos podría dañar el mar de la conciencia.
Una piedra había sido sacudida por la batalla de espadas y ahora cayó desde arriba. Sin embargo, no llegó al suelo, ya que fue cortado en innumerables pedazos por las intenciones invisibles de la espada, su forma final fue una arena fina que fue arrastrada al valle por el viento, sin dejar rastro.
Chen Changsheng observó esta escena y cayó en un largo período de silencio.
Y luego bajó la cabeza y pensó durante mucho tiempo.
Recordaba las escenas cuando Su Li le enseñó la espada en el desierto y algunas cosas que sucedieron después.
Antes de que Su Li se fuera al Continente de la Luz Sagrada con la Santa Doncella, dejó varias cartas para el mundo.
Una carta había cortado la última osadía de la Secta de Longevidad, mientras que otra había cortado el brazo de Zhu Luo.
Estas cartas eran, naturalmente, los objetos más preciosos y terroríficos.
Chen Changsheng recibió dos cartas.
A partir de este acto, uno podía ver que Su Li realmente lo valoraba, incluso con respecto a él como el discípulo que asumiría su legado.
Estas dos cartas habían salvado la vida de Chen Changsheng dos veces y también habían avanzado en gran medida su cultivo en la espada.
En este momento, este camino estaba lleno de intención de espada, esperando ser estimulado, las existencias más nítidas del mundo, capaces de cortar todas las cosas.
Esto le hizo recordar la escena cuando abrió la carta de Su Li en la cocina de la Academia Ortodoxa.
En ese momento, permaneció en medio de los intentos de la espada, sin atreverse siquiera a moverse.
Ahora, todavía no podía moverse.
¿Podría caminar tan lejos?
Chen Changsheng recordó de repente que antes de que Su Li se fuera, también había dejado una carta para Qiushan Jun.
Pero Qiushan Jun no lo había querido.
¿Tal vez esta era la discrepancia entre él y Qiushan Jun?
Cuando Su Li le estaba enseñando la espada, Su Li había dicho que no estaba mal, con solo un pequeño espacio entre él y Qiushan.
Cuando se despidió en la ciudad de Xunyang, Wang Po también le dijo que era bastante bueno, pero aún un poco menos que Qiushan.
Desde Xining hasta la capital, había escuchado palabras similares muchas veces.
Al principio, en las conversaciones de otros, la disparidad entre él y Qiushan Jun era tan grande como la que existe entre los cielos y la tierra. Poco a poco, esta brecha comenzó a reducirse, pero incluso ahora, cuando era Papa y Qiushan Jun todavía era un discípulo ordinario de la Secta de la espada del Monte Li que se había escondido durante cinco años, todavía no había nadie que dijera que había superado Qiushan Jun.
Chen Changsheng miró esas intenciones de espada invisibles como si estuviera mirando al propio Su Li. "Todavía quiero intentarlo".
Quería probar y ver si podía dar un paso más, o incluso salir de este camino.
Quería probar y demostrarle a Su Li que la elección de enseñarle la espada era la correcta.
Quería probar y demostrar al mundo que tal vez él no podría ser más fuerte que Qiushan Jun, pero no carecía, al menos en algunos aspectos.
Su mente estaba puesta, su aura tranquila.
Su mente era clara y brillante, como una espada que había sido lavada por el agua durante incontables años.
Innumerables espadas emergieron en silencio de su vaina, innumerables peces saltando del agua, buscando convertirse en dragones.
Innumerables resplandores de espada iluminaron el sombrío pasadizo, arrebatando el brillo del mundo al escindirse ante los invencibles intentos de la espada.
Los crujientes gritos de las espadas de repente estallaron, formando gradualmente una línea, la línea que dividía el mar del cielo. Y luego, de repente, se callaron.
......
......
La gente en el acantilado nerviosamente miraba el camino.
Ivy oscureció su visión y los intentos de la espada desordenaron la luz. Era imposible para ellos distinguir cualquier detalle, pero podían distinguir vagamente los brillos de espada.
De repente, la espada se ilumina de repente explotó con luz, por lo que es imposible ver nada.
Los gritos de espada resonaron en un estallido de ruido, por lo que era imposible escuchar nada más.
Solo podían ver los vientos revolviendo la grava y el polvo que chocaban y luchaban dentro del Read more ...