Capítulo 826 - Lo que extraño
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
La alfombra de oración no era nueva ni vieja, ni gruesa ni delgada. Estaba en el estilo que normalmente se puede encontrar en iglesias o salones ancestrales.
El segundo maestro Tang silenciosamente consideró esta estera de oración.
Cuando se postra, una alfombra de oración entre las rodillas y el piso duro facilitaría el proceso.
Pero, ¿a quién tenía que arrodillarse?
Por supuesto, fue el Papa.
Innumerables lámparas colgaban como estrellas en el cielo nocturno, un joven parado entre ellas.
El segundo maestro Tang no habló, ni escuchó a nadie más hablar.
El silencio en el pasillo continuó.
Los ojos de Tang Second Master se estrecharon lentamente.
Finalmente se movió. Se acercó a la alfombra de oración, usó sus manos para levantar su solapa delantera y lentamente se postró.
Sus movimientos fueron muy lentos y meticulosos. Desde levantar la solapa delantera hasta doblar las rodillas para inclinar su cuerpo hacia delante, se requería mucho tiempo.
Este período de tiempo fue suficiente para que piense en muchas cosas.
Escuché que hace muchos años, el Papa anterior también vino a Wenshui, pero ¿cuándo tuvo Padre que hacer una reverencia tan grande?
Eres de la misma generación que Tang Tang, así que soy tu mayor, así que ¿cómo puedes aceptar semejante reverencia?
Incluso si no me llamas 'Segundo tío', al menos deberías decir que este arco no es necesario.
Este fue realmente un largo período de tiempo, y para el segundo maestro Tang, casi podría describirse como interminable.
Como era lo suficientemente largo para que él pensara tanto, era naturalmente tiempo suficiente para que ese joven en las sombras hablara.
¿Pero por qué no he oído nada de ti?
Incluso pensó, ¿acaso extrañé una palabra?
¿Tal vez su voz es demasiado suave o habló demasiado vagamente?
No, la iglesia estaba tan silenciosa que se podía escuchar la voz más suave.
Por ejemplo, en este momento, sus rodillas finalmente se encontraron con la alfombra de oración, la suave tela ligeramente arrugada.
Pero para sus oídos, fue un trueno estremecedor.
......
......
De esta manera, el segundo maestro Tang se postraba ante Chen Changsheng.
Justo hasta que realmente ocurrió, él todavía no se atrevió a creer.
No se atrevió a creer que Chen Changsheng realmente no le diría que este arco no era necesario.
No se atrevió a creer que Chen Changsheng aceptaría tan tranquilamente su reverencia.
El ruido de sus rodillas al encontrarse con la alfombra de oración se desvaneció. Todo el sonido dentro de la sala se desvaneció, dejando un silencio perturbado solo por las linternas que se balanceaban en el viento.
El segundo maestro Tang se arrodilló sobre la alfombra de oración, su corazón cada vez más frío y más frío, su expresión cada vez más indiferente.
Y luego, se levantó.
Se había arrodillado como una montaña que se derrumbaba lentamente, pero se había levantado como el sol de la mañana saliendo del agua: directo y sin la menor vacilación.
Él se había levantado solo.
Era evidente que esto era falta de respeto ante un Santo, pero actualmente estaba muy enojado, por lo que estaba decidido a ignorarlo.
Miró a Chen Changsheng e indiferentemente dijo: "He visto a Su Santidad el Papa".
Solo había visto al Papa, pero no estaba respetando nada.
La iglesia daoísta permaneció en silencio. Las innumerables linternas se balanceaban en el viento, crujiendo como un mar de pinos en las montañas.
Chen Changsheng miró en silencio al segundo maestro Tang, que buscó durante mucho tiempo.
Esta era la primera vez que veía al segundo maestro Tang.
Ya sea durante el golpe del Mausoleo de Libros o matando a Zhou Tong en la calle nevada, él y el misterioso Maestro Tang Tang nunca se habían visto.
El segundo maestro Tang era muy similar a Tang Treinta y seis. Ambos tenían caras hermosas, personalidades frías y auras nobles, pero el rostro del segundo maestro Tang estaba teñido de tristeza.
"Cuando te veo, pienso muy naturalmente en él. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que lo vi", señaló Chen Changsheng. "Cuanto más tiempo pasa, más extraño el tiempo que estuvo a mi lado. Hizo muchas cosas por mí en ese momento".
El segundo maestro Tang preguntó: "¿Cómo?"
Chen Changsheng dio un paso adelante, saliendo de la luz fluctuante hacia el segundo maestro Tang.
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