Capítulo 614 - Respiración
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
La sangre fluyó de la muñeca de Chen Changsheng y cayó sobre las cadenas, salpicando cuando comenzó a fluir a través de las líneas talladas, filtrándose profundamente en las cadenas. La sangre que quedaba en la superficie de las cadenas se evaporó con el viento y se convirtió en llamas azules que emitían un calor y una luz ilimitados en todas las direcciones.
Este fue el formidable poder de la sangre de Phoenix.
Esas líneas talladas en las cadenas y la pared comenzaron a emitir rayos de luz a medida que el conjunto comenzó a activarse lentamente. Un Qi que era difícil de describir, como hojas de primavera o frutos de otoño, apareció en la caverna.
Este Qi contenía la fuerza divina del tiempo.
En este momento, el pequeño Dragón Negro ya había llegado al suelo, su cabello negro volaba alocadamente a su alrededor, su hermoso rostro rebosante de intención diabólica. ¡Con su ropa negra igualmente loca y voladora, uno podría ver débilmente trozos de hielo como diamantes derramándose!
Esto era una señal de que ya había llevado a su Qi a la cima.
El presente ella ya estaba parada en el divino Dominio. Menos aún Chen Changsheng, incluso un poderoso general divino como Xue Xingchuan no era necesariamente un rival para ella cuando luchaba solo.
En este momento, toda la atención y la atención de Chen Changsheng estaban en las esbeltas cadenas. Era como si hubiera olvidado todas las otras cosas a su alrededor y también olvidara la atracción fatal de su sangre ... pero anteriormente, cuando el pequeño Dragón Negro había hablado de la primera sangre, de los juramentos y de las mujeres, su mano izquierda había temblado por un momento. Esto indicó que él había sido honesto durante todo este tiempo. ¿Cómo podía olvidar la maldición que le había impuesto el Dao celestial sobre su destino? ¿Cómo iba a olvidar las repetidas advertencias que le había dado el Mayor Yu Ren después de esa noche en el templo?
Naturalmente, ya había preparado un plan para lidiar con un Dragón Negro posiblemente trastornado.
Dos golpes extremadamente fuertes vibraron a través de la pared de piedra. ¡Era como si alguien estuviera en lo más profundo de la pared, golpeando un tambor de guerra, o como dos truenos distantes en el cielo nocturno extremadamente distante!
En la pared, las manos de esas dos leyendas que sostienen las cadenas de metal de repente explotaron con una feroz luz blanca. En última instancia, esta luz se transformó en dos esferas de luz blanca casi sólidas del tamaño de un huevo de gallina. Estas dos bolas de luz viajaron rápidamente a través de las cadenas de metal, llegando instantáneamente a esos dos tobillos blancos como la nieve.
Nadie podría ser más rápido que esas dos bolas de luz blanca. Incluso si los más veloces Xu Yourong y Nanke estuvieran aquí, tampoco serían capaces de evadirlos. El pequeño Dragón Negro que había entrado una vez más en el divino Dominio y tenía una fuerza ilimitada podía pasar el día en el Mar del Sur y pasar la noche en el Gran Continente Occidental, pero aún así no podía ser más veloz que esas dos bolas de luz.
Estas dos bolas de luz fueron tan rápidas como un rayo.
Porque siempre habían sido un rayo.
¡Grieta! ¡Grieta!
Dos sonidos extremadamente claros explotaron a través de la tranquila caverna subterránea.
El pequeño Dragón Negro se detuvo en el aire frente a Chen Changsheng, su cabello negro y su vestido negro cubierto por el relámpago blanco brillante, y la diabólica intención de su hermoso rostro desapareció sin dejar rastro.
Las dos esbeltas cadenas en sus tobillos vibraron rápidamente, tintineando y traqueteando intensamente. Eran esbeltos sauces en una tormenta, propensos a romperse en cualquier momento.
Con un suave aullido de ira y dolor, se estrelló contra el suelo.
Ella quería ponerse de pie, pero falló. Su pequeño cuerpo encerrado en el vestido negro todavía temblaba. Era muy extraño, pero también tenía un tipo de encanto indescriptible.
Después de un largo tiempo, el poder del trueno transmitido a su cuerpo a través de las cadenas se aflojó gradualmente, el rayo y la nieve desaparecieron simultáneamente.
Arduamente se sentó, su rostro anormalmente pálido, el miedo aún persiste en sus pupilas verticales. La mirada que dirigió a Chen Changsheng ya no estaba enloquecida y avariciosa, sino resentida.
Chen Changsheng giró su cabeza para mirarla, las comisuras de sus labios se animaron en una sonrisa.
Su rostro también estaba muy pálido, probablemente porque cuando estaba activando la matriz para romper la restricción, había pe Read more ...