Capítulo 506: Regreso a casa, sin embargo, pensando en once calles

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Mientras cruzaba el Puente de la impotencia, casi se topa con una tía que se apresura a su casa para evitar la nieve. Justo cuando la tía estaba a punto de caerse, Xu Yourong extendió una mano para apoyarla.

Fue solo entonces que la tía se dio cuenta de que había una niña sosteniendo un paraguas en este puente cubierto de nieve. Mientras decía su agradecimiento, vio el delgado vestido que llevaba la chica y dijo con preocupación: "Mi señora lleva tan poco ¿no tienes frío?"

Xu Yourong negó con la cabeza. Sosteniendo el paraguas, continuó caminando por la nieve.

Mientras caminaba desde el Palacio Imperial a la sección sur de la ciudad, vio los paisajes urbanos familiares de su infancia. Cuando cruzó un puente de piedra, vio los aleros colgantes de su casa y las paredes que claramente habían sido encaladas.

Incluso ella, que tan cuidadosamente guardó la serenidad de su corazón Dao, no pudo evitar sentirse un poco desconcertada.

Desde el momento en que supieron que la misión diplomática del sur había entrado en la capital, la puerta del medio del estado divino general de la propiedad del este había sido abierta de par en par. Sin mencionar a la multitud que había desafiado la nieve para esperar en las calles, solo hablando de los mayordomos y subordinados de la propiedad del divino General, incluso sus ojos estaban a punto de volverse verdes de anticipación.

Llevando el paraguas, Xu Yourong se acercó. Bajo los ojos de toda la multitud, entró en el estado divino del General de Oriente.

Nadie fue capaz de decir cómo había entrado. Los camareros y subordinados que se habían ocupado durante decenas de días en preparación para este día estaban todos estupefactos. ¿Quién era esta persona?

Con un crujido, dobló su paraguas y luego lo golpeó ligeramente contra la puerta de la finca, sacudiendo la nieve de la superficie del paraguas hasta el suelo.

Con un sollozo, Shuang'er salió disparado a través de la puerta. Sin embargo, debido a que había estado de pie durante algunas horas, sus dos piernas estaban bastante doloridas. En su estado de nerviosismo, cuando llegó frente a Xu Yourong, apenas podía pararse derecha y casi arrodillarse frente a ella.

Xu Yourong tendió una mano para apoyarla y le preguntó: "Nunca has sido tan cortés en el pasado. En los pocos años que no he estado aquí, ¿quién te ha enseñado las reglas? ''

Por supuesto, solo estaba bromeando, pero Shuang'er no pudo ni siquiera sonreír. Solo podía llorar persistentemente y luego, sintiendo sus acciones bastante humillantes, se limpiaba la cara con la manga. En un instante, el maquillaje que se había aplicado con un cuidado tan meticuloso se arruinó.

Finalmente, la gente de la finca comenzó a reaccionar. La niñera Hua se adelantó rápidamente, con los labios temblorosos, pero no logró pronunciar ninguna palabra.

'' ¡La joven dama ha regresado! ''

Alguien gritó, los petardos se encendieron instantáneamente, y los fuegos artificiales iluminaron el cielo algo nebuloso y nevado.

En el clamor, otra persona gritó: "No podemos llamarla 'Joven', ¡tenemos que llamarla 'Doncella Santa'! ''

"¡Respetuosamente damos la bienvenida a la Santa Doncella!"

Al ver que la puerta del medio se cerraba rápidamente, la multitud que había estado esperando en la nieve durante tanto tiempo se dispersó al instante, viajando a varios lugares para difundir las noticias.

El Fénix había regresado a casa.

"Estás usando tan poco, ¿qué pasa si te congelas?"

Madame Xu llevó a Xu Yourong a la mano, con una cara profundamente preocupada mientras lágrimas caían de su rostro ''.

"¿Cómo podría congelarse el pequeño Fénix de mi familia con los vientos ordinarios y la nieve sin refinar del mundo humano?"

Xu Shiji dijo con una sonrisa mientras acariciaba ligeramente su barba. Parecía la imagen de un padre orgulloso y gentil. Suspiró, "No nos hemos visto desde hace varios años, has crecido tanto. En realidad ... realmente te convertiste en la Santa Doncella ''.

Cuando ella ingresó al South Stream Temple, él y muchos otros básicamente habían confirmado que su hija se convertiría en la Santa Doncella del sur en el futuro, pero él no había esperado que el día llegara tan rápido. Con este único pensamiento, no pudo evitar emocionarse. Estaba setenta por ciento orgulloso y satisfecho, treinta por ciento libre y relajado. Sabía en su corazón que incluso si ahora tuviera otros pensamientos, la emperatriz divina no lo trataría como lo hacía antes y al menos le permitiría conservar una cara pequeña. En cuanto al clan Read more ...