Capítulo 402 La noche en sus dedos

Traducido por: Hypersheep325

Editado por: Michyrr

Liang Xiaoxiao había muerto. La acusación que hizo antes de su muerte naturalmente fue increíblemente poderosa, pero el único otro testigo de este evento en el Jardín de Zhou Zhuang Huanyu además de dar una explicación extremadamente concisa de la situación, había mantenido la mayor parte del tiempo su silencio, por lo que la historia dada por el fallecido carecía de muchos detalles. Cuando se combinó con el hecho de que el objetivo del testimonio de Liang Xiaoxiao no era una persona común, este caso concerniente al Jardín de Zhou había caído naturalmente en un atolladero. Después de varias semanas, todavía no había habido progreso.

El estado de Chen Changsheng fue excepcionalmente único, por lo que las grandes potencias dentro del Li Palace definitivamente estarían vigilando de cerca este caso. En el Gran Examen, la gente ya había notado que la relación entre Zhexiu y la Academia Ortodoxa era bastante buena. Además, en las llanuras nevadas del norte, este joven lobo había logrado un enorme mérito militar, recibiendo la profunda apreciación de varios de los Generales divinos del Gran Ejército Zhou. En cuanto a cómo se desarrollaría este asunto, muchas personas sentían que finalmente dependería de la decisión de la Emperatriz divina. Por esta razón, el patio de Zhou se había convertido en el foco de innumerables miradas atentos, porque esta era la residencia de Zhou Tong. La voluntad de la emperatriz divina siempre se había expresado a través de este perro salvaje, el más desquiciado y el más despiadado. También fue porque después de que la Corte Imperial se hubiera llevado a Zhexiu lejos del Palacio Li, lo habían mantenido allí.

Pocas personas sabían que la legendaria prisión de Zhou, esa prisión que podría causar que incontables ministros y oficiales militares se pierdan de miedo al oír el nombre, era en realidad el mismo edificio que la residencia oficial de Zhou Tong. Estaban separados el uno del otro por solo unos zhang de diez y dos y dos puertas endebles que parecían ser arrastradas por un fuerte viento. "Un buen momento y un paisaje hermoso, días indefensos". Este dicho fue precisamente sobre la residencia de Zhou Tong y la prisión de Zhou Tong. El primero tenía la belleza incesante de las cuatro estaciones, y los últimos días indefensos, sin salida y la incapacidad de ver el cielo azul.

El rinoceronte negro arrastró un pesado carruaje de metal, pasando por el arco de piedra del patio de Zhou y llegando al siniestro edificio que tenía delante.

Aunque la distancia era muy corta, Zhou Tong todavía usaba habitualmente su carruaje.

Además, cuando estaba frente a la emperatriz divina, solo cuando estaba en su carruaje de metal se sentía seguro.

El carruaje negro de rinoceronte se detuvo en el túnel que daba acceso a la prisión. Con un chirrido, la puerta del carruaje se abrió lentamente.

Zhou Tong salió lentamente del carruaje de metal, subconscientemente mirando hacia el cielo nocturno. Bajo la luz de las estrellas, su rostro parecía algo pálido.

En el momento en que salió del carruaje, el guardia que rodeaba la prisión de Zhou aumentó repentinamente en varios niveles. En cuanto a las sombras debajo de los aleros cercanos, no se sabía cuántos expertos cultivadores estaban ocultos en su interior.

Zhou Tong no era débil. Era un experto en Condensación Estelar, uno de los pocos expertos de la Corte Imperial de Zhou. Aun así, todavía vivía con mucha cautela. A menos que una investigación lo requiriera, raramente abandonaría la prisión de Zhou. Incluso cuando se fue, en la gran mayoría de los casos, fue solo para ir al Palacio Imperial. Además, cada vez que se iba, traía innumerables guardaespaldas imperiales. Esto fue porque él entendió claramente que innumerables personas querían matarlo. Si uno clasificara a las personas según la cantidad de gente que las quería muertas, Su Li definitivamente estaría detrás de él.

Al llegar a esa celda fría y lúgubre de la prisión, miró el cuerpo mutilado del joven lobo, ni siquiera una sola parte de su cuerpo había quedado intacta. La apariencia de Zhou Tong no cambió, ni mostró nada de esa excitación pervertida de los rumores. Solo había calma.

Desde que aceptó la orden divina de la Emperatriz y se hizo cargo del Departamento de Oficiales Purgadores, Zhou Tong había interrogado a innumerables prisioneros y llevado a cabo innumerables torturas. Ni siquiera sabía cuántas personas en condiciones más miserables que Zhexiu había visto, por lo que no era posible que esta escena lo conmoviera. Pero él no creía que se había vuelto insensible, y tampoco se permitiría adormecerse ante estas sangrientas escenas. Insistió en la Read more ...