Capítulo 1084 - Pregunta de Xu Yourong
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
En algún momento, Linghai Zhiwang y Daoist Siyuan habían aparecido en los dos extremos de la plaza.
Aquellos caballeros que acababan de comenzar a cargar de repente pidieron que se detuvieran sus monturas. Aquellos fervientes creyentes que acababan de llorar un momento atrás ahora se habían retirado bajo la guía de An Hua. Ocasionalmente se volvían para mirar con temor al centro de la plaza, donde todavía se libraba la batalla.
No era solo el Gloom Willow y la Falling Star Stone. El Mapa del Río de la Montaña y el Sello del Universo también habían aparecido en el Palacio Li.
Con la repentina aparición del gran despliegue del Li Palace, Daoist Wu perdió su oportunidad de contraatacar.
Le habían clavado una daga en el vientre. Si la visión de uno era buena, incluso podrían ver que esta daga había dado media vuelta dentro de su vientre.
Un aullido de dolor salió de los labios del taoista Wu mientras el cepillo en su mano y la paleta oculta en su manga cayeron al suelo.
Hu Thirty-Two sacó la daga y luego la apuñaló en el otro pie del Daoist Wu. Fue rápido, estable y preciso.
Trabajó con gran calma y concentración, como si se hubiera olvidado de cualquier otra cosa.
Daoist Wu dejó escapar otro grito miserable. Cayó al suelo y no pudo volver a levantarse.
La sangre brotó de su cuerpo en una vista anormalmente sangrienta y cruel.
Como el sabio de la pintura, Daoist Wu naturalmente tenía sus aspectos extraordinarios. A pesar de que comenzó a cultivar tarde, había vivido mil años y su nivel de cultivación había alcanzado un nivel insondable desde hace mucho tiempo. Incluso bajo la supresión de la formación del Li Palace, no debería haber sido capturado tan rápidamente sin resistencia.
Pero no se podían permitir errores en esta empresa, y tendrían que irse pronto, por lo que no podían dejar a Dao Dao una sola oportunidad de contraatacar. Por lo tanto, Chen Changsheng solo podía confiar en este sangriento método de lucha y usar las dagas más anormales de Hu Treinta y Dos.
El Gloom Willow dejó la tierra y volvió a la mano de Linghai Zhiwang. La Piedra Estrella Caída dejó escapar unos pocos rayos de luz antes de volver a la funda de la espada.
"No morirás, así que no hay necesidad de preocuparte".
Chen Changsheng sacó sus agujas y las apuñaló en varias aperturas Qi vitales del Daoist Wu, ayudándolo a detener el flujo de sangre de su vientre.
El Daoísta Wu estaba pálido y gritaba con ira e incredulidad irreprimibles: "¡Te atreves a lastimarme!"
Chen Changsheng tomó tres píldoras diferentes de su manga y las puso en la boca de Daoist Wu, pero él no respondió.
El taoísta Wu dijo con severidad: "¡Esta es la voluntad de lord Wang!"
Chen Changsheng continuó ignorándolo mientras inspeccionaba las heridas en sus pies y confirmaba que no hablaban en serio.
Dao Dao Wu sentía que el dolor de sus heridas aumentaba, y su rabia y odio alcanzaban su punto máximo. Comenzó a gritar en voz alta, cada vez más palabras sucias y profanidades abriéndose paso en su discurso.
Chen Changsheng lo miró, sus ojos brillantes y serenos.
Hu Thirty-Two susurró: "Su Santidad, ¿deberíamos apuñalarlo de nuevo?"
Daoist Wu al instante sintió como si hubiera una daga en su pecho. Con un miedo terrible, inconscientemente cerró la boca.
Un Hua llegó.
Chen Changsheng dijo: "Te lo entregaré".
Un Hua ya sabía quién era este anciano vestido de gris. Aunque un poco nerviosa, todavía asintió con la cabeza.
Chen Changsheng asintió y dijo: "En un momento, el Li Palace se volverá vacío, si alguien viene ..."
La voz de un Hua tembló cuando respondió: "Lo mataré".
Chen Changsheng dijo con calma y en serio: "Mi significado es que no importa quién venga".
Él se refería a ese erudito de mediana edad.
En términos de prestigio y el estatus que uno tenía en los corazones de las personas, si pasara muchos años más cultivándolo, aún sería inferior a ese erudito.
Solo una persona como An Hua podría ignorar la existencia de esa persona por su bien.
"No importa quién venga, lo mataré".
La respuesta de un Hua esta vez fue muy rápida. Su voz también se había calmado. Ya no temblaba, y parecía extremadamente determinado.
Linghai Zhiwang y Daoist Siyuan la miraron con aprecio, y la primera incluso le dio un consejo.
"Recuerda cortar la cabeza. Esto garantizará su muerte".
Ante estas palabras, An Hua, que apenas había logrado calmarse, estaba estupefacta. Read more ...