Capítulo 1016 - Todos los seres vivos están sufriendo
Traducido por: Hypersheep325
Editado por: Michyrr
Jin Yulu no se arrodilló. Se detuvo algo más lejos, mirando al Emperador Blanco con una expresión algo compleja.
El Emperador Blanco se sentó en la enorme silla de piedra, con los pies zhang varios del suelo.
Lógicamente hablando, dado que era simplemente imposible pisar el suelo, naturalmente se seguía que era imposible mantenerse en pie.
Pero él se levantó.
Como una majestuosa montaña coronada de nieve que aparece entre los cielos y la tierra.
Los cielos y la tierra respondieron.
Diez montañas nevadas resonaron estruendosamente.
La nieve se derrumbó mientras una ventisca envolvía la media montaña.
Los expertos semihumanos fueron obligados a retroceder desde la silla de piedra por el poder de la ventisca.
Cuando cualquier parte de esta furiosa tormenta tocaba la túnica imperial del Emperador Blanco, inmediatamente desaparecía, como si fuera absorbida en su cuerpo.
El Emperador Blanco dio tres pasos hacia adelante a través de la ventisca.
Cuando la ventisca entró en su cuerpo, se hizo cada vez más grande, renovando su túnica imperial, sus ojos pasando del gris al blanco más puro, imbuido de un poder escalofriante y amenazante.
Miró a lo lejos mientras preguntaba con indiferencia: "¿Qué ha sucedido estos últimos años?"
El Primer Ministro se postró en la nieve y usó las palabras más simples y la velocidad más rápida para relatar todos los eventos principales.
Después de escucharlo todo, el Emperador Blanco parecía impasible, su expresión permanecía serena.
La voz de Jin Yulu de repente vino a través de la ventisca.
"Bie Yanghong está muerto, al igual que Wuqiong Bi".
La única respuesta del Emperador Blanco fue arquear sus cejas.
La ventisca se disipó gradualmente.
Jin Yulu se burló, "En aquel entonces, dije que deberías casarte con una esposa virtuosa. ¿No parece ahora que tu vista es incluso peor que la de Bie Yanghong?"
El Emperador Blanco permaneció en silencio, aunque ahora miraba en cierta dirección.
Todos los expertos semihumanos y los soldados junto al lago siguieron su mirada.
En esa dirección estaba White Emperor City.
La verdad ya había aparecido antes de todos.
Madame Mu verdaderamente había planeado encarcelar al Emperador Blanco por varios años.
La multitud consideró totalmente apropiado que el Emperador Blanco dirigiera un gran ejército y marchara sobre la Ciudad del Emperador Blanco.
Pero el Emperador Blanco no se movió.
Él dejó de contemplar esa ciudad. Su mirada se movió a un lugar a diez-unos li de distancia y le preguntó: "¿Eres Chen Changsheng?"
Mucha gente siguió su mirada y se dio cuenta de que Chen Changsheng no había venido.
Más importante aún, muchas personas, incluidos los Prefectos de la Ortodoxia, ya se habían ido. Solo él y Tang Treinta y Seis todavía estaban allí.
......
......
Separados por diez li, Chen Changsheng y el Emperador Blanco se miraron el uno al otro.
Él no respondió al Emperador Blanco.
Su silencio hizo que el ambiente en esta cordillera se volviera bastante extraño.
El Primer Ministro Demi-humano dio un paso adelante, con la intención de hablar.
Alguien más habló antes que él.
La voz de Tang Treinta y seis sonó. "Las palabras del Emperador Blanco son descorteses".
Hace muchos años, Zhu Luo fuera de la ciudad de Hanqiu y la Santa Doncella en la ciudad de Xunyang habían hecho la misma pregunta, sin una sola palabra fuera de lugar.
En ese momento, las preguntas de Zhu Luo y la Santa Doncella simbolizaban su curiosidad hacia Chen Changsheng, así como una especie de reconocimiento.
En ese momento, su nombre había aparecido recientemente en el continente.
Pero el presente no era el pasado.
Ya no era ese joven taoísta de Xining Village, ese nuevo estudiante de la Academia Ortodoxa. Él era el Papa de la raza humana.
Incluso el Emperador Blanco estaba siendo extremadamente irrespetuoso al hacer esta pregunta.
Así que, aunque los personajes semihumanos estaban enfurecidos por la reprimenda de Tang Treinta y Seis, no tenían forma de refutarlo.
El Emperador Blanco miró tranquilamente a Chen Changsheng y de repente preguntó: "¿Su Santidad el Papa solo está aquí para ver?"
Había ignorado a Tang Treinta y Seis, pero se había dirigido a Chen Changsheng de otra manera.
Chen Changsheng aún no dijo nada.
Cuando estaba con Ta Read more ...