Capítulo 116 - Por lo tanto
Traducido por: Berrrybunz
Editado por: Robin, Leo y De Andre
Yu Jin Hong tuvo un mal presentimiento. Si la verdad fuera expuesta hoy, el Clan Yu definitivamente sería el blanco de críticas públicas.
Sucede que el tipo al frente era demasiado firme para la comodidad. Obviamente no poseía ninguna técnica extraña, pero sus movimientos fluían continuamente, como una corriente de agua, extremadamente molesto, y no tenía forma de escapar de la otra parte.
Pero sabía que la situación era urgente, así que no importa qué, no podía dejar que Tang Tian le impusiera una acusación falsa.
Yu Jin Hong lanzó una mirada severa, con las manos enroscadas, como si rasgueara el laúd, y comenzó a rasguear.
Weng!
Era como si las cuerdas vibraran y provocaran una resonancia en la cavidad, profundas y temblorosas.
Liang Qiu se puso serio, dio un bufido frío, y lentamente empujó sus palmas hacia afuera. Sus movimientos fueron extremadamente lentos, como si le costara un gran esfuerzo, su ropa se encendió y el aire circundante pareció dejar de fluir.
Ambas partes enfrentaron energías.
Liang Qiu gimió, sus pies se hundieron completamente en el suelo, sus ropas se rompieron en pedazos y revolotearon como mariposas, retrocedió diez pasos continuamente y cada huella era profunda y clara como si estuvieran talladas.
Yu Jin Hong parecía aún peor, tenía el pelo revuelto y un charco de sangre fresca salía de la esquina de su boca.
Sin embargo, en este momento, no podía importarle menos, aprovechó la oportunidad para ampliar la brecha y gritó con severidad: "Tang Tian, ¡no intentes difamar a mi Clan Yu! La disputa con el Clan Shangguan, ¡nunca fue un tabú en nuestro Clan Yu! Esa fue una pelea familiar, pero hoy, ¡esta es una pelea personal! Ze Qing y yo, ambos hemos admirado a la señorita Qian Hui durante mucho tiempo, pero sabemos que no somos dignos de ella, por lo que ahogamos nuestras penas en el vino. Todos, tales sentimientos, ¿está mal? ¿Cómo es diferente de todos? Nuestros sentimientos son verdaderos para que el Cielo sea testigo. Esta batalla de hoy, fue solo por una razón, este Tang Tian vulgar, ¿cómo puede ser digno de la señorita Qian Hui? ''
Los jóvenes maestros en la farola, revelaron expresiones de empatía. Lo que Yu Jin Hong dijo les había llamado la atención.
Para entonces, Yu Ze Qing se había calmado, simulaba estar afligido e indignado: "¡Así es! ¡Promoví este asunto! ¡Estaba indignado! Asumiré responsabilidades por mis propias acciones, lo que sea que tengas, ¡ven a verme! ¡Estoy dispuesto a morir dignamente por la señorita Qian Hui!
Todo el mundo parecía afligido, y surgieron sentimientos de empatía, algunos ojos incluso enrojecidos por las lágrimas.
Shangguan Wei entró en pánico, nunca pensó que estos dos serían tan elocuentes, justo cuando estaban a punto de revelar la conspiración del Clan Yu, en un abrir y cerrar de ojos, ¡estaban a punto de hacerles cambiar el juego!
"¿Morir digno?" Tang Tian sonrió, "Muy bien".
Todos salieron de la triste atmósfera que Yu Ze Qing acaba de crear, en sus ojos, la sonrisa de Tang Tian ahora parecía extremadamente salvaje.
Tang Tian señaló a Yu Ze Qing, "destrúyelo".
La expresión de Yu Ze Qing cambió, gritando con horror: "¡Uno puede morir, pero no ser humillado!"
Shangguan Wei estaba a punto de precipitarse sin más trámites, pero fue bloqueado por Tang Tian, Tang Tian señaló a los demás, '' Déjalos que, aparte de Huo Yan Guang, desaten al resto de ellos ''.
Shangguan Wei desató a todos los jóvenes maestros.
"¡Quien se niegue a tomar medidas, je je!" Tang Tian se burló.
Los jóvenes maestros eran como animales asustados e inmediatamente corrieron hacia adelante para desnudar a Yu Ze Qing.
Los ojos de Yu Jin Hong estaban a punto de estallar de rabia, pero estaba profundamente enredado con Liang Qiu. El amante de la paz Liang Qiu se enfureció esta vez, Yu Jin Hong se atrevió a actuar de manera inocente y le dio la vuelta a la situación, ese fue su error.
El enfurecido Liang Qiu fue relativamente aterrador.
No importaba lo que Yu Jin Hong hiciera, incluso si se trataba de un movimiento asesino como el que acababa de ocurrir, aún no podía escapar de las molestias de Liang Qiu.
Tang Tian se dio vuelta y examinó a los jóvenes maestros.
Todos ellos guardaron absolutamente silencio.
'' Desde hoy en adelante, ¡soy tu Gran Jefe! '' Tang Tian agitó su mano, '' ¡De acuerdo, salúdame! ''
Los jóvenes maestros se miraron el uno al otro.
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