Capítulo 140: Contratos
Traducido por mí, editado por drpetro.
Debe haber dragón antes de que se pueda crear el molde 3D.
Después de pensar un poco, Ye Qing resolvió asumir este desafío.
''¡Por supuesto que podemos!''
Una vez confirmado, Ye Qing una vez más miró a esas personas "ricas": "Debería ser muy claro cuántas dificultades están involucradas. Podemos hacerlo, pero ...... ''
'' ¡Los detalles que podemos discutir en privado! '' La sonrisa del representante de Compass, ya que él era realmente feliz.
Al oír que Ye Qing aceptaba la solicitud del Grupo Compass, los demás representantes sonrieron encantados.
Especialmente el vicepresidente de Disney de Asia. El hecho de que hiciera este viaje personal naturalmente significaba que quería más que todos los demás.
El segundo en preguntar fue la Corporación Buncey
Se basaban principalmente en la industria de servicios de Francia.
Su representante dijo: "Ya que incluso se pueden fabricar dragones, entonces lo que tenemos definitivamente no es problema".
También sacaron una foto, sin embargo, Ye Qing soltó un gran suspiro de alivio al verlo.
Fue un primer plano de la flor del iris. El iris es una de las flores más conocidas de Francia. Buncey, al ser parte de la industria de servicios, naturalmente poseía muchos hoteles y servicios de alta gama.
La flor del iris también era el logotipo de su compañía, para implicar que su servicio sería como el iris, cómodo y de alta calidad.
Su esperanza era ordenar un lote de flores de iris de aleación que nunca se desvanecen para colocar en sus establecimientos y regalar a sus clientes.
La solicitud fue bastante simple, la flor del iris era una de las flores decorativas más solicitadas, lo que significaba que se podían obtener fácilmente en cualquier ciudad.
Aunque era simple, Ye Qing todavía reafirmó el hecho de que la flor del iris se podía hacer, pero todo estaba en detalles. Por ejemplo, el pistilo del iris y los patrones ondulados en sus pétalos.
"Desde que nos busca, es nuestra responsabilidad entregar una exquisita obra de arte que supere todas las demás obras de arte de metal disponibles en el mercado".
"Podemos hacerlo". Ye Qing confirmó de manera tranquilizadora: "¡Y podemos garantizarle que nuestra velocidad será diferente a cualquier otra que haya imaginado!".
En cuanto al resto, no había necesidad de él para decirlo.
La buena calidad y la velocidad rápida naturalmente significaban que el precio sería más caro que las obras de arte de metal comunes.
Un dragón era posible e incluso una flor era posible. El resto de las órdenes de las compañías tampoco tenían problemas, ya que eran todas las cosas que requerían detalles y se centraban más en su exquisitez que en cualquier otra cosa.
Y eran de gran tamaño. Por ejemplo, una de las compañías que venían de las islas de Hawai quería construir 12 enormes cocoteros de metal.
Por otro lado, el vicepresidente de Disney de Disney aún permanecía en silencio. Lo que querían era algo para colocar en el Disneyland de Shanghai, pero tenían que mantenerlo en secreto, por lo que todo se discutiría en privado más tarde en la noche.
Siendo el anfitrión y habiendo discutido la breve descripción de las posibles dificultades que podrían surgir con el producto, Ye Qing invitó calurosamente a los clientes extranjeros para una fiesta en el hotel Sheraton. Eran solo las 5:30, pero para cuando llegaran sería justo a la hora de la cena.
Todos los clientes se pusieron sonrientes, comentaron lo generoso que era y huyeron más rápido que nadie.
El hotel Sheraton tampoco estaba lejos, a solo dos calles.
Las reservas en el hotel se completaron mucho antes, treinta habitaciones individuales, lo que garantiza lo suficiente para que todos puedan obtener una habitación privada.
La sala de reuniones también fue preparada. Ye Qing originalmente quería volver mañana y tener una reunión formal de negocios, donde el contrato y los precios se resolverían de acuerdo con las necesidades de los clientes.
Sin embargo, el calendario de los extranjeros estaba completamente lleno, por lo que la firma solo podría hacerse esta noche después de la cena, ya que tenían que regresar a Shanghai a primera hora de la mañana de mañana.
Xu Ninggong también se alojaba en una de las elegantes habitaciones del séptimo piso del Sheraton.
Ella, que acaba de terminar la firma del contrato con el gobierno de Zhongyun para ser el embajador civil de la ciudad, asistía a otro banquete a las 6:30.
El banquete también fue reservado en el Sheraton. Xu Ninggong en este momento acaba de regresar a su habitación, descans� Read more ...